Borrell reitera a Israel que evite las muertes de civiles y mejore el acceso humanitario a Gaza

VALÈNCIA (EP). El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha instado en una llamada con el ministro de Exteriores israelí, Eli Cohen, a proteger a los civiles, evitar muertes de población civil en Gaza y mejorar el acceso humanitario a la Franja.

En un intercambio por teléfono que se encuadra en los contactos con los países de la región, Borrell ha expresado su solidaridad y compromiso con la seguridad de Israel tras el ataque sin precedentes de Hamas y ha hecho hincapié en las mediaciones en marcha para la liberación de rehenes.

Igualmente ha subrayado "la necesidad de proteger a los civiles, evitar víctimas civiles y mejorar el acceso humanitario" en Gaza, en una nueva llamada a Israel para que actúe de acuerdo al Derecho Internacional, después de que la UE acordara pedir pausas en la guerra entre Israel y Hamás y corredores humanitarios para permitir el flujo constante de ayuda humanitaria a los palestinos.

El jefe de la diplomacia europea ha recalcado ante Israel que también Washington entiende como necesaria las pausas humanitarias y ha insistido en que la UE está lista para apoyar los esfuerzos de estabilización en Gaza y trabajar para relanzar el proceso político para la solución de dos Estados, asegurando que es "la única opción viable para lograr la paz duradera".

Frente a las llamadas reiteradas para una interrupción en la ofensiva israelí en Gaza que permita la actividad de los actores humanitarios con garantías, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha dejado claro que no aceptará ningún alto el fuego temporal si no está garantizada la liberación de los más de 240 rehenes que permanecen retenidos por milicianos palestinos.

El dirigente israelí ha llamado a seguir trabajando hasta lograr una "clara" victoria que, espera, "resuene durante generaciones". Este mismo viernes Netanyahu se ha reunido con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, descartando igualmente la entrada de combustible en la Franja de Gaza o cualquier posible ayuda económica.