CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Borriana llevará a cabo un estudio de geolocalización para conocer la ubicación exacta de las fosas de la Guerra Civil que puedan haber en el término municipal. Unos trabajos que se efectuarán en una primera fase, para continuar más adelante con la investigación sobre cada una de las fosas descubiertas.
Con este proyecto, el edil de Patrimonio, Vicent Granel, explica que “lo que se pretende es realizar un inventario completo y detallado de las fosas comunes de la Guerra Civil en Burriana, con el doble objetivo de proteger su emplazamiento y de plantear futuras intervenciones de inhumaciones”.
Así pues, el proyecto cuenta con una primera fase, en la que se realizará un estudio de localización de represaliados y fosas mediante la investigación en archivos locales y nacionales, como los del Ejército o el Archivo General de la Guerra Civil, conocido popularmente como el archivo de Salamanca. Además, se procederá a la consulta de sumarísimos y otras fuentes documentales como archivos privados o hemerotecas.
Esta fase se complementará con un trabajo de campo intensivo con fuentes orales, grabación de entrevistas y testimonios y recuperación de todo tipo de documentación (gráfica, escrita o física) sobre las posibles víctimas. De este modo, se creará un fichero de familiares para futuras fases de intervención en la recuperación de inhumaciones.
La segunda fase se llevará a cabo con la redacción de un proyecto de prospección geofísica para la actuación en las zonas donde, gracias a la documentación recabada en la primera fase, se presuma la existencia de fosas comunes. En esta exploración del subsuelo se pretende documentar todas las características físicas de cada fosa para preparar futuras actuaciones.
Granel ha explicado que “existen datos dispersos que hablan de un mínimo de una o dos fosas”. El calendario previsto de ejecución es de 9 meses para la primera fase de documentación y de 3 meses para las campañas de prospección geofísica.
En la actualidad, Borriana carece de un estudio en profundidad sobre las fosas comunes de la Guerra Civil en el municipio, de tal forma que solamente se conoce el emplazamiento aproximado de una de ellas, ubicada por referencias orales, en la zona del actual cementerio municipal. También existen referencias según Patrimonio Nacional del traslado de una fosa (932/2009 CAST) al Valle de los Caídos. Los datos concretos de ambas son prácticamente inexistentes, aunque sí que consta una gran cantidad de fusilamientos en Burriana entre los años 1939 y 1942.
Como ha explicado Granel, “es esencial documentar todas las fosas que puedan existir para iniciar de forma inmediata un protocolo de protección de las mismas para evitar así la posible situación de desamparo en la que se puedan encontrar, lo que conlleva un fuerte riesgo de alteración, deterioro o desaparición”.
Según los técnicos, la repercusión del proyecto se extiende territorialmente, al ámbito de la comarca de la Plana Baixa y de su entorno inmediato, ya que Borriana contaba con con una prisión de alta capacidad, concretamente el exconvento de los mercedarios, que llegó a albergar entre 1.600 y 2.000 represaliados oriundos de varias poblaciones.
Por otro lado, en el ámbito provincial este proyecto es de gran interés social, ya que escasean los mapas de fosas en la provincia. Además, en el apartado cultural, esta intervención es importante para aportar nuevos conocimientos y datos a la línea de divulgación y recuperación de la memoria histórica que ya viene realizando desde hace años el Ayuntamiento de Borriana, como por ejemplo en la recuperación y puesta en valor del refugio antiaéreo del camino de Onda o las Jornadas del Memorial Democrático que se han celebrado los últimos años.