CASTELLÓ. Los ayuntamientos de Burriana, l'Alcora y Almassora están inmersos actualmente en diferentes iniciativas para ampliar sus respectivos cementerios municipales.
La actuación más avanzada de todas la ejecuta en Burriana la empresa Prefabricados Darpor. La tercera fase de las obras de ampliación del cementerio en la parcela anexa se lleva a cabo estos días con la construcción de 200 nichos y 72 columbarios, todos en bloques de cuatro alturas. Los trabajos, cifrados en 250.470 euros, culminarán a mediados de mayo y se sumarán a los 176 nichos que se ejecutaron en la anterior fase.
El consistorio burrianense ya reparó en noviembre del año pasado dos cubiertas y una solera que estaba agrietada en el cementerio antiguo y en la zona de La Barraca. La empresa Ravi Obras Transportes y Excavaciones ingresó 98.869 euros por los trabajos.
En l'Alcora, seis empresas optan a ejecutar las obras de ampliación del cementerio en el solar posterior. La mejor posicionada para la adjudicación es la mercantil Consbe. La constructora elegida alzará 184 nichos de hormigón a dos caras en pabellones de cuatro alturas y creará un nuevo pasillo con aceras. Los trabajos fueron licitados en 196.253 euros.
También falta poco para iniciar las obras de construcción de 272 nuevos nichos en Almassora. El Ayuntamiento ha licitado el contrato por 200.000 euros y seis meses de plazo de ejecución. Las hornacinas estarán repartidas en cuatro alturas y se ubicarán al norte del cementerio, en la zona nueva que fue urbanizada en 2006. La empresa adjudicataria habilitará también un nuevo jardín como vial peatonal. El consistorio dispondrá de espacio para alzar otro pabellón mortuorio similar cuando sea necesario.
Otro ayuntamiento que da pasos para ampliar el cementerio municipal es el de Vinaròs, pero en este caso las obras aún tardarán varios años en concretarse. El consistorio aprobó en noviembre de 2022 la expropiación de terrenos por 63.665 euros pero aún no ha movido ficha para redactar el proyecto de ampliación.
El pasado mes de enero finalizaron los trabajos de construcción de los últimos 160 nichos y ya se ha agotado el suelo disponible. La ampliación es una asignatura pendiente que habrá que abordar en lo que queda de legislatura, ya que no queda espacio para crear enterramientos ni para el resto de servicios funerarios y también se necesita más zona de aparcamiento.
En los últimos años, otros municipios de la provincia como la Vall d’Uixó y Nules han culminado ampliaciones de envergadura. En el cementerio de la Vall d’Uixó, la empresa Construcciones Artana alzó a mediados del año pasado 240 nichos y 72 columbarios repartidos en seis alturas. Y en Nules, el Ayuntamiento invirtió 169.139 euros en la ampliación del cementerio a finales de 2022. La empresa Latra 2010 alzó 160 nichos en el módulo octavo del cementerio.