BURRIANA. En un año especialmente marcado por la ausencia de lluvias, el Ayuntamiento de Burriana ha aprobado el Plan de Emergencias Municipal de Sequía con el objetivo de ahorrar recursos hídricos y adaptar los protocolos ante futuros nuevos episodios de sequía.
El PEM de Burriana es un instrumento para facilitar la gestión de los sistemas de abastecimiento urbano en las situaciones coyunturales de sequía en las que se pueden ver comprometidos sus recursos hídricos, que tiene como objetivo establecer protocolos, indicadores y modelos de actuación a llevar a cabo ante tales situaciones de desabastecimiento o sequía en la ciudad. Tras ser presentado el pasado 23 de enero por la empresa Facsa y ser sometido a exposición pública, el nuevo Plan de Emergencia de la capital de la Plana Baixa ha superado el periodo sin alegaciones.
Las nuevas medidas impulsadas desde el consistorio responden a la necesidad de seguir dotando a Burriana de herramientas para ser más sostenible y respetuosa con el medio ambiente y dan cumplimiento a la Ley 10/2001, de 5 de julio, del Plan Hidrológico Nacional, donde el Ayuntamiento de Burriana, como administración pública responsable de sistemas de abastecimiento urbano que atiende a una población superior de 20.000 habitantes, debe disponer de un Plan de Emergencia ante situaciones de sequía, que contenga las reglas y medidas previstas en el Plan Especial de actuaciones en situaciones de alerta y eventual sequía de la demarcación hidrográfica del Júcar.
"El Plan de Emergencias Municipal de Sequía de Burriana nos permitirá aprovechar de forma más eficiente nuestros recursos hídricos y continuar transformando nuestro municipio en una ciudad más ecológica y respetuosa con el medio ambiente", ha explicado el concejal de Vía Pública, Mario Trullen.
