CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Burriana ha concluido las obras de rehabilitación del archivo municipal, que fue cerrado en marzo debido al riesgo de derrumbe. Las obras iniciales han incluido labores de apuntalamiento para asegurar la estructura del edificio. Ahora, se han completado los trabajos de impermeabilización y acondicionamiento necesarios para garantizar su seguridad y funcionalidad.
Las dependencias municipales, situadas en la calle Sant Cristòfol, fueron clausuradas tras un informe técnico que recomendaba impedir la entrada de personas y realizar apuntalamientos urgentes en las áreas más afectadas por las filtraciones de agua. El edificio de tres plantas, que se encuentra dentro del Plan Especial del Conjunto Histórico de Burriana, presentaba daños significativos en su estructura porticada.
La inspección, solicitada por el equipo de gobierno, reveló el desprendimiento del recubrimiento cerámico de las viguetas, dejando el hierro oxidado expuesto debido a las continuas filtraciones de agua en los últimos años. También se detectaron daños similares en otro patio de luces y en los baños de los pisos superiores, así como una vigueta afectada.
El edificio, que data de 1965, se utilizaba como archivo municipal hasta su clausura. La falta de mantenimiento adecuado en los últimos años ha llevado a la necesidad de precintar el inmueble y suspender su uso inmediato.
Al respecto, el concejal de Patrimonio, Alejandro Clausell ha valorado “el esfuerzo económico que está destinando el equipo de gobierno debido la falta de mantenimiento de la inmensa mayoría de edificios públicos de Burriana durante los últimos años”. Clausell, además, ha indicado que “después de estas reparaciones minuciosas durante los últimos meses, el archivo municipal está listo para retomar su actividad”.