CASTELLÓ. Óscar Cano se jugaba mucho más que tres puntos el pasado domingo frente al Cartagena. Con las seis derrotas consecutivas que arrastraba y la pobre imagen mostrada en su último partido, frente al Oviedo, el técnico albinegro necesitaba una reacción inmediata de sus jugadores para evitar males mayores.
En uno de sus partidos más importantes desde que se hizo inquilino del banquillo del Castellón, el granadino volvió a apostar por el bloque del ascenso, incluyendo como titulares a siete de los jugadores que llevaron al equipo al fútbol profesional en el play off exprés de hace cuatro meses.
Con las novedades de Campos, Muguruza y César Díaz, fundamentales en el ascenso logrado por los albinegros la pasada temporada, Cano recurrió a la base de aquel equipo, donde muchos de sus futbolistas también tuvieron que manejarse en circunstancias críticas hace dos años, en plena lucha por evitar el descenso a Tercera.
De esta forma, el técnico del Castellón ha restaurado el modelo del arranque de Liga, en el que llegó a alinear hasta nueve futbolistas del curso anterior en un mismo once. Por aquel entonces, los recién fichados aún estaban en proceso de aclimatación y algunos salían de lesión o estaban en baja forma.
Con la Liga más avanzada, muy pocos se han ganado la titularidad de forma consistente sobre la marcha. Tan solo Álvaro Fidalgo, que se ha unido a Marc Mateu y Josep Señé, fijos en los esquemas del técnico desde el primer día.
Lo que ha quedado claro es que cuando las cosas se han torcido de forma dramática, la apuesta de Cano ha sido clara por los jugadores que le han dado los mayores éxitos como técnico albinegro. Y eso que ante el Cartagena no pudo contar con todos, ya que Carles Salvador y Jorge Fernández no estuvieron por lesión, mientras que Juanto Ortuño, que regresó hace pocas semanas tras superar unos problemas musculares, entró en la segunda parte. El murciano, con una buena actuación en la media hora que estuvo en el campo, apunta a recuperar un puesto en el equipo inicial y unirse al bloque que sacó las castañas del fuego ante el Cartagena.