CASTELLÓ. La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco, junto al diputado autonómico del PP Rubén Ibáñez y la concejala del PP Susana Fabregat han visitado Afanias Castellón ante la situación de impagos por parte de la Generalitat Valenciana, que arrastran desde el mes de diciembre. Afanias es la entidad de referencia en Castellón en la atención y tratamiento a personas con diversidad funcional intelectual y sus familias. La situación es límite, el retraso en los pagos desde hace casi tres meses hace que no pueden afrontar ya el pago a sus 140 trabajadores, ni a proveedores.
Carrasco insta a la Generalitat del socialista Ximo Puig a saldar la deuda pendiente con todas las entidades sociales sin más demora. "Dar solución este problema que la Generalitat ha creado, a través de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, debe ser una prioridad. Venían a rescatar personas y están abandonándolas. La situación de Afanias es lo suficientemente grave como para que la alcaldesa, Amparo Marco, se plante ante Puig, sin embargo, con su silencio demuestra ser más socialista que alcaldesa", explica.
"Es inaceptable que el gobierno valenciano esté asfixiando a las entidades sociales del tercer sector que están llegando donde la administración no llega, prestando servicios indispensables a las personas más vulnerables. En el caso concreto de Afanias los impagos de la Generalitat afectan directamente a más de 400 familias usuarias. El tripartito de PSOE, Compromís y Podemos, en el Ayuntamiento y en la Generalitat, dice estar al lado de las personas, pero si continúan sus impagos se pone en peligro la prestación de servicios a los más vulnerables", agrega.
"Hoy con la visita a Afanias trasladamos nuestro apoyo sin fisuras a su justa reivindicación y exigimos el pago inmediato a todas las entidades sociales a las que la Generalitat Valenciana debe dinero. El dinero debe llegarles en tiempo y forma para poder mantener la calidad del servicio, de lo contrario, centenares de personas corren el riesgo de quedar desatendidas. Es cuestión de voluntad política y de prioridades y ésta lo es", insiste Carrasco.