Castelló descarta asumir las 121 viviendas públicas y espera que el Consell vuelva a licitar el proyecto

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló confía en que la Conselleria vuelva a sacar a concurso las 121 viviendas públicas de la zona de Censal tras quedar desierta la licitación por segunda vez. El lote forma parte de un gran contrato para construir 721 pisos en la Comunitat Valenciana. Dividido en ocho paquetes, según la localización geográfica, el de la capital de la Plana (el único de la provincia) no ha generado interés entre las empresas del sector, al igual que otros cinco (solo se han presentado ofertas en València y Benidorm).

Ante esta situación, el portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales, descarta que el consistorio vaya a intervenir para asumir finalmente el proyecto. "En estos momentos no nos los hemos planteado", asegura para insistir en que "esperamos que la Conselleria lo saque de nuevo con una oferta" más atractiva para las empresas.

El concejal popular culpa al Gobierno de España de dificultar a las administraciones autonómicas y locales el desarrollo de programas con vistas a impulsar viviendas de alquiler asequible. "La legislación está siendo tremenda y afecta especialmente a los jóvenes. No se favorece la construcción de vivienda. Se están poniendo muchos impedimentos y eso de alguna forma nos perjudica a todos. Si el Gobierno, en lugar de limitarse a poner palos en las ruedas, se dedicara a facilitar la liberalización de suelo para que los promotores pudieran acceder con más facilidad a la construcción, seguramente irían mejor las cosas", señala.

Características de las viviendas

Los 121 pisos están proyectados en dos parcelas situadas en la calle Riu Llobregat, números 2 y 14. La primera tiene una extensión 2.945,08 metros cuadrados y se plantea la ejecución de un residencial con 82 viviendas. Se trata de hogares de 1, 2 y 3 dormitorios en planta baja y en las 6 plantas superiores, con superficies que oscilan entre 50 y 80 metros cuadrados. Dispondrá de 83 plazas de aparcamiento y otros tantos trasteros en el sótano. El coste total de esta edificación asciende a 10,2 millones de euros, de los que 3,5 procederán de ayudas europeas.

El segundo solar, de 1.727,46 m², recoge la construcción de 39 moradas y sus correspondientes plazas de parking. Los pisos serán de 1, 2 y 3 dormitorios, también con superficies que entre 50 y 80 metros cuadrados. El coste de la obra ascenderá a 4,9 millones de euros, de los que 1,6 millones procederán con fondos europeos.

La materialización de los dos bloques públicos se enmarca dentro del Plan Vive del Ejecutivo valenciano. El pasado 8 de julio, el Ayuntamiento, a través del concejal de Urbanismo, Sergio Toledo, oficializó la firma de cesión de los dos terrenos a la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (Evha), representada por su director general del Evha, Ernesto Fernández.