CASTELLÓ. La provincia de Castellón sigue reduciendo las cifras de contagios de coronavirus, pero mantiene unos registros de muertes vinculadas a la pandemia sanitaria estremecedoras. En su última notificación, este sábado, la Conselleria de Sanidad ha informado de nueve fallecidos en las comarcas castellonenses desde el anterior registro, el viernes.
Con ello, a día de hoy ya han perdido la vida en Castellón 641 personas que oficialmente estaban contagiadas de covid-19. En cuanto a los positivos, desde el inicio de la pandemia (el primero se detectó en Vila-real a finales de febrero pasado), en el territorio castellonense ya se han documentado 35.161 casos.
La caída de casos tiene reflejo en la presión asistencial, que poco a poco mejora cada día. Este sábado, los tres hospitales de la provincia que luchan contra la pandemia (el Comarcal de Vinaròs, el General de Castelló y la Plana, en Vila-real) albergan a 362 personas, con 57 pacientes en las Unidades de Cuidados Intensivos. Son 43 personas menos en los centros sanitarios que un día antes.
En cuanto a nuevos brotes, Sanidad ha notificado 10 brotes en la provincia de Castellón. El mayor de ellos lo ha registrado en la capital de la Plana, donde ha rastreado 15 contagios fruto de una reunión social. Asimismo, en Castelló ha detectado otro brote, con 3 personas contagiadas en el ámbito educativo.
Pero la peor situación en este aspecto se da en el norte de la provincia. No en vano, los otro ocho brotes se los reparten tres localidades del Baix Maestrat. Cuatro de ellos han sido detectados en Vinaròs (todos de origen social y con 9, 7, 5 y 4 casos). Asimismo, en Benicarló Salud Pública ha detectado tres focos de contagio: dos de ellos son de origen social (7 y 6 positivos) y el otro laboral (6 personas afectadas). El brote restante ha sido detectado en Peñíscola, con cinco vecinos contagiados en una reunión social.
De esta manera, a pesar de las restricciones de movilidad y al cierre obligado de la hostelería, las reuniones prohibidas (lo máximo permitido son dos personas si son de diferentes hogares) siguen siendo el principal problema a la hora de atajar la pandemia en el territorio castellonense.