¿Cuál es el objetivo final? La duda se plantea porque detrás parece que hay algo más. Al mismo tiempo que se celebra el Consejo de Ministros, se acercan posiciones con ERC y PDECat que junto con Podemos pueden aprobar el techo de gasto y a futuro los Presupuestos Generales del Estado. Si este juego a dos bandas es real, Pedro Sánchez estaría consiguiendo su objetivo que es permanecer más tiempo en La Moncloa. El caso es saber si esa rentabilidad en la ocupación del poder será definitiva o temporal. Jugar a ser Dios es complicado y Cataluña y el país no están para estos juegos.
Jugar al escondite. La foto de ayer del Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y del President de Cataluña, Quim Torra no es gratuita. ¿Les interesaba a los dos? ¿Quién ha ganado? ¿Quién ha perdido? ¿Porqué se ha prestado Sánchez a la presión de Torra? ¿Qué obtienen ambos a cambio? Y lo de las reuniones que según quien hable se han producido o no es otro festival. ¿Son reuniones? ¿Son cumbres entre Gobiernos o Estados según quien se pronuncie? ¿Son encuentros protocolarios? ¿O son fotos sin más? Lo de desactivar cediendo puede ser una buena política según el momento, pero creo que el actual no es el oportuno. La sensación que ofrece este desfile mediático es que la necesidad y la urgencia han primado sobre la importancia de lo que se está jugando. Sánchez ha arriesgado mucho. No olvidemos que pronto habrá elecciones autonómicas, municipales y europeas y no sabemos si también generales. Las fotos con Torra en el Palau de Pedralbes o en las minicumbres entre vicepresidentes o ministros y consellers, además de la cena con Foment del Treball, la patronal catalana, pueden ser solo eso, fotos. Y con fotos no se solucionan las cuestiones.
Partidos paralelos. Siguiendo con el símil futbolístico. Se juegan varios partidos al mismo tiempo en esta liga. A saber: la permanencia de Sánchez en el Gobierno, la negociación de los PGE, el próximo Gobierno en la Junta de Andalucía, las próximas elecciones el 26 de mayo, una posible convocatoria de generales, el inicio del juicio por el procés, la posición de Torra como President de la Generalitat con Puigdemont en Waterloo, la huelga de hambre de los encarcelados, -curiosa la petición de que la abandonen por parte de todos los que han sido President como Jordi Pujol, Artur Mas, José Montilla, Carles Puigdemont, Quim Torra-,…así que al final de la competición habrá vencedores y perdedores y alguien ganará aunque sea de penalti y fuera del tiempo reglamentario con VAR y lo que se tercie. Pero se me antoja peligroso el juego. El tiempo como siempre será quien decida el resultado y lo que es más importante los ciudadanos que pronto tendrán que ir a las urnas y ahí se medirá la eficacia de este carrusel de fotos.
¿Y la oposición a qué juega en esta liga? Pues según se mire lo tienen fácil o difícil. El asunto catalán es de tal calado que cualquier movimiento es vital. Desde la oposición es sabido que es más fácil criticar y analizar, en especial en esta circunstancia y con tanto movimiento de acuerdos, pactos, negociaciones de un nuevo gobierno andaluz, irrupción del factor Vox y sus peculiaridades ideológicas, entre otras cosas. Desde la óptica de la izquierda, Podemos lo tiene un poco más complicado, intenta jugar un papel de mediador que ya no tiene porque en Cataluña dejó todo el mercado a Ada Colau y compañía. Y lo tienen difícil porque no detentan el poder y no tienen todas las claves de los posicionamientos de Sánchez y Torra y presupongo que de ERC que juega a un papel distinto, distanciándose del PDECat,….será táctica para el futuro.