CASTELLÓ. Las tiendas de discos viven en la actualidad un particular renacimiento silencioso a la par que apasionante. Estos establecimientos, que extienden su idiosincrasia más allá de meros puntos de venta y estriban en lugares de encuentro cultural, vertebraron en su pasado dorado a generaciones de artistas, músicos, expertos o aficionados. Con la llegada de la inmediatez digital y el raudo e imparable crecimiento del streaming, los locales especializados en el formato físico parecieron convertirse en reliquias de otra época. Sin embargo, tras el cierre de reconocidos comercios como Discos Medicinales o Discos Ritmo, último bastión hasta principios de 2024, y tras el efecto de la pandemia, los cajones donde ojear, elegir, escuchar y adquirir vinilos o CD regresan al casco urbano de la ciudad en la tienda de discos Arpegio.

El negocio, situado en la céntrica plaza del Real y con acceso también por la trasera calle de Bayer, abrió sus puertas el pasado 21 de junio después de transformar el antiguo local y taller de motocicletas Montesinos. "Tenemos la broma entre nosotros de que, en vez de cerrar, como todo el mundo, abrimos en vacaciones", comenta César Couto, uno de los propietarios de la tienda, en la que también trabajan su hermano Santiago y su sobrina Patricia. El espacio musical, todavía en sus primeros meses de vida, rodea al público cuando se adentra en él de carátulas de álbumes de un sinfín de estilos y épocas expuestos cuidadosamente en la pared o dispuestos en los clásicos casilleros. Asimismo, entre sus diversas proyecciones, Arpegio busca convertirse en un necesario nexo para el siempre activo panorama musical castellonense y su audiencia.

Una tienda de discos en Castelló

La aventura "quijotesca" —como él mismo la define— de Couto, afincado en València, hasta la inauguración del establecimiento rondaba sus pensamientos desde hace tiempo y responde, en parte, a las demandas de los aficionados a la música castellonenses. "Llevamos años con presencia en ferias españolas y europeas y habíamos estado en varias en Castelló con buenos resultados", recuerda. Tras realizar una prueba de un mes en el verano de 2024 con un stand en el centro comercial Salera y refrendarla con otra de cuatro meses en Navidad, las peticiones para abrir un comercio en la localidad se apilaban. "La gente nos pedía, por favor, abrir una tienda", asegura uno de los fundadores de Arpegio. "En una ciudad como esta, con la historia y el ecosistema musical que atesora, no nos parecía lógico que no hubiera ninguna".

Precisamente, en la filosofía del nuevo negocio subyace la necesidad recíproca de aportar y nutrirse de dicho panorama autóctono para crear una sinergia positiva. A tal efecto, el equipo de Arpegio busca apoyar a cantantes, bandas o promotores castellonenses a través de la venta de entradas para eventos en clubes como Dabuten! o de la cesión de su espacio de forma gratuita para llevar a cabo firmas de discos. El catálogo sonoro de la tienda se amplía para ofrecer "un poco de todo". "No podemos abarcar toda la música del mundo, pero sí intentamos tener algo de cada estilo; somos muy eclécticos", reconoce César Couto. Así, en un recorrido con un vistazo a las repletas estanterías, resaltan portadas icónicas y referentes de un amplio abanico de géneros: de soul y jazz al pop actual o la mejor electrónica.

De Billie Eilish a Nirvana o Rocío Jurado

Los productos que copan las distintas secciones internas del establecimiento viajan más allá de las puras notas musicales y se extienden a distintivos elementos de promoción comercial. Estos, además de profundizar en el 'repertorio' del local, representan un punto de entrada para las nuevas generaciones a artistas o grupos que empiezan a quedar lejos en el tiempo. "Tenemos todo tipo de merchandising —desde pines a parches o botellas—, que llega mucho a la gente joven; los pueden adquirir por un módico precio, pero ya tienen su recuerdo de Linkin Park o Rammstein", explica Couto. En uno de sus apartados, Arpegio "recupera" otro espacio cada vez más vacío en la ciudad y acoge la compra y venta de DVD de cine. "Nuestro lema es ir poco a poco; queremos una tienda grande y buena, pero pido paciencia porque no se levanta de la noche a la mañana", afirma.

El local ubicado en la plaza del Real cumplirá en apenas unos días cuatro meses desde que alzó su persiana por primera vez. Hasta el momento, "la respuesta ha sido muy buena: la gente se acerca poco a poco y muestra su alegría por la apertura, incluso nos da las gracias", señala uno de los propietarios del negocio. En cuanto a las características de la clientela que accede al comercio en estos primeros pasos, el rango discurre desde "adolescentes que empiezan a escuchar música y vienen a por discos de Billie Eilish, Nirvana o Queen hasta más veteranos que piden a Rocío Jurado o Miguel Bosé, lo de toda la vida", detalla César Couto. "De aquí a unos años esperamos crear una buena base y contar con material que entre y salga, que no esté parado". En definitiva, Discos Arpegio supone una bocanada de aire fresco que devuelve a Castelló una tradición enraizada y perdida... hasta ahora.