CASTELLÓ. La Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo por fin da el paso definitivo para la reforma del edificio de Correos tras meses de espera. Lo hace al licitar el proyecto por 3,3 millones de euros. Se trata de una actuación cofinanciada al 50% por la Unión Europea, aunque todo apunta a que la inversión saldrá finalmente de las arcas de la Generalitat Valenciana. Al menos, los plazos así lo indican.
Según el pliego de prescripciones técnicas y administrativas, las empresas interesadas en la obra civil tienen hasta el 8 de septiembre para presentar sus ofertas. A partir de ahí, se prevén varias semanas de baremación hasta resolver la adjudicación, que deberá ser aprobada en última instancia por el propio departamento de Marián Cano.
La UE obliga a acabar las obras antes del 31 de marzo de 2026
De acuerdo con lo que establecen las bases, la ejecución del proyecto se alargará 12 meses, un intervalo de tiempo que superará con creces el tope fijado por los fondos europeos para acabar, esto es, 31 de marzo de 2026. Aunque fuentes de la Conselleria esperan que las concurrentes en la licitación planteen una reducción respecto al plazo de la obra, parece muy complicado que la reforma se pueda hacer en apenas seis meses. Eso sí, siempre que los trabajos empiecen a finales de septiembre o en octubre de este año. En este punto, las mismas fuentes reconocen que "si no se llega, lo asumiremos con financiación propia y esos fondos [europeos] se derivarán a otra obra" para no perderlos.
A principios de 2025, la consellera de Innovación e Industria firmó la aprobación del proyecto previo y los pliegos de la reforma después de recibir el informe favorable de supervisión que emite la vicepresidencia primera y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda. A partir de ese momento, se activaba la cuenta atrás para el concurso público. Sin embargo, ante la falta de noticias en los meses siguientes, trascendió que el impulso definitivo al proyecto dependería de la prórroga de los nuevos presupuestos autonómicos.

- Interior del edificio de Correos. -
- Foto: ANTONIO PRADAS
Siete meses de espera desde la firma del proyecto previo
En mayo, se barajó con la posibilidad de que el pliego se publicara en la plataforma de Contratación en las siguientes semanas. Más lejos de la realidad, al final han transcurrido más de siete meses desde que se produjera aquella firma del mentado proyecto previo para ver el proyecto en la plataforma de Contratación (se publicó este jueves, 10 de julio).
La reforma integral de Correos afectará a 2.572 metros cuadrados. La nueva distribución convertirá el sótano en archivo y almacén. La planta baja, totalmente diáfana, contará con un salón multifuncional de eventos, un espacio expositivo y un punto de atención del Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (Ivace+i). El Ayuntamiento de Castelló aprovechará ese espacio para usos culturales y turísticos.
El primer nivel acogerá los servicios territoriales de la Conselleria de Innovación e Industria, que se localizarán también en el segundo piso. Además, habrá despachos con un funcionamiento institucional. Por último, la planta cubierta se destinará a almacenaje. El cambio de concepción de Correos obligará a modificar los itinerarios para crear tres independientes.
Inaugurado en 1932, el edificio de Correos es un destacable exponente del estilo neomudéjar, considerándose además una de las mejores muestras del modernismo valenciano en Castelló. Fue creado por el arquitecto Demetri Ribes (estación del Norte de València) en colaboración con el castellonense Joaquín Dicenta Vilaplana. Su impronta se aprecia en la ornamentación floral y geométrica, con la influencia neomudéjar visible en el empleo del ladrillo y los arcos lobulados. Se trata, según los expertos, del edificio de mayor valor patrimonial de la ciudad.