VALÈNCIA. La intervención protagonizada este lunes por el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, para anunciar su principio de acuerdo con Vox de cara a aprobar los presupuestos valencianos del presente ejercicio no ha dejado indiferente a nadie.
La importancia de la comparecencia no surge tanto del pacto alcanzado con el partido de Santiago Abascal, sino por el contenido del discurso del jefe del Consell, que se vio obligado a defender determinados postulados de Vox que, hasta ahora, el presidente de la Generalitat -ni tampoco su partido, el PP- habían compartido.
Así, uno de los focos de la crítica realizada por Mazón se centró en el Pacto Verde Europeo. De esta manera, lamentó el "malentendido ecologismo" el desarrollado por el anterior gobierno del Botànic ademásde algunas decisiones inspiradas en leyes europeas que "dañaron" la agricultura, ganadería y pesca valenciana. "Una agenda ambientalista en Europa mal concebida, porque lo que van a lograr en última instancia es precisamente la no protección en el medio ambiente y también el perjuicio también en muchos casos irreversible", manifestó, para llamar a la "acción" contra él porque contiene medidas "que van directamente contra la esencia de nuestra economía".
En esta línea, reclamó "ir a la raíz" respecto a las políticas que su juicio "impidieron" llevar a cabo "las actuaciones preventivas necesarias para que el barranco del Poyo no se convirtiera en una trampa letal", algo que relacionó directamente con el Pacto Verde Europeo. "Algunas de sus consecuencias aplicadas de manera radical y como hemos padecido en la dana han constatado que los críticos tenían consistencia", aseguró, protagonizando así un discurso muy similar al que viene pronunciando Vox desde tiempo atrás.
Además, Mazón recalcó que la protección del medioambiente "no puede traducirse en que las infraestructuras necesarias para proteger a la población se frenen por los postulados climáticos más extremistas", para añadir que presentará una iniciativa en el Comité Europeo de las Regiones para "exigir que las inversiones en infraestructuras hidráulicas que salvan vidas no estén condicionadas por criterios medioambientales obligatorios extremos derivados de la aplicación literal del Pacto Verde".
Un posicionamiento contundente frente a un acuerdo sellado en 2020 y liderado por la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, compañera de partido tanto de Mazón como de Núñez Feijóo, y que tuvo por tanto los votos favorables del Partido Popular Europeo (PPE), algo que siempre ha criticado Vox. Así, aunque en la recta final de la pasada legislatura se produjeron discrepancias en el seno de la formación popular sobre la velocidad fijada en determinadas medidas, el Pacto Verde Europeo fue renovado como una de las condiciones obligadas para que Von der Leyen, con el apoyo de socialistas, liberales y verdes, continuara al frente de la Comisión Europea.

- Feijóo y Von der Leyen -
- Foto: PP
Una circunstancia que recordaba este martes la exministra de Transición Ecológica y vicepresidenta de la Comisión Europea, Teresa Ribera (PSOE), en una comparecencia en la comisión de Medio Ambiente recogida por eldiario.es: “Los objetivos del pacto verde siguen ahí. Von der Leyen recibió el apoyo del Parlamento, porque entre sus objetivos pretendía facilitar el alcance de esos objetivos e iba a mantener esos objetivos”.
Mientras, en la otra orilla, Vox ponía el dedo en la llaga este martes a través de su secretario general, Ignacio Garriga, que no dudó en poner al PP frente a la contradicción servida por el discurso de Mazón. "Lo que es evidente es que el PP llegó a votar el Pacto Verde europeo y unas políticas que fomentaban la inmigración ilegal con el PSOE en Bruselas, y ahora hay un líder del PP (Mazón) que está diciendo que todo eso es malo, que condiciona y condena la ruina a la agricultura, a la ganadería y a la pesca, y que las políticas de fomento de la inmigración ilegal han traído inseguridad a los valencianos", recalcó, para recordar que Feijóo hablaba "hace unos meses de chantaje cuando Vox ponía esto sobre la mesa".
Curiosamente, este cambio de discurso protagonizado por Carlos Mazón y respaldado por la dirección nacional del PP, ha tenido lugar a pocas semanas de que se celebre en Valencia el congreso del PPE, programado para el 29 y 30 de abril. Una cita para la que, tal y como ha informado este diario, ya se preparan movilizaciones de protesta desde la izquierda y donde el jefe del Consell puede tener la ocasión de exponer sus críticas al Pacto Verde Europeo en presencia de la propia Von der Leyen.