CASTELLÓ. Las organizaciones sociales BDS y Castelló per Palestina han solicitado al Ayuntamiento de Benicàssim que retire su apoyo institucional al Festival Internacional de Benicàssim (FIB), alegando que su promotora forma parte del fondo de inversión KKR, que apoya a Israel. En un escrito presentado al gobierno municipal, los colectivos denuncian que mantener vínculos institucionales con el FIB “supone una forma de colaboración indirecta con la ocupación ilegal de Palestina”, y exigen al consistorio una respuesta ética acorde con los principios de derechos humanos.
En opinión de BDS y Castelló per Palestina "ninguna institución pública debe contribuir a sostener o normalizar un régimen de apartheid”, y por ello solicitan la aprobación de una moción que garantice que el Ayuntamiento no financie, de forma directa o indirecta, eventos ni entidades vinculadas con vulneraciones de derechos humanos. En segundo lugar, proponen la creación de un protocolo ético que excluya de contratos y subvenciones municipales a empresas o fondos relacionados con la violación del derecho internacional humanitario. “Es una cuestión de coherencia institucional: no se puede declarar el compromiso con los derechos humanos y, al mismo tiempo, contratar con quienes los vulneran”, subraya el documento.
Por último, exigen la desvinculación total del Ayuntamiento con el FIB a partir de su edición de 2025, lo que implicaría no otorgar apoyo económico, logístico ni institucional mientras persista la relación entre la promotora del festival y el fondo KKR. “No estamos en contra del festival ni de la música, sino de que Benicàssim sea cómplice de una injusticia”, insisten los firmantes.