CULTURA

Los Estanques llegan a Castelló con su pop libre lleno de psicodelia

El grupo participará, el 31 de octubre y el 1 de noviembre en La Bohemia, en el festival Sixties Rock Weekend

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CASTELLÓ. La experiencia de escuchar un nuevo álbum de Los Estanques es como meterse en un largo pasillo lleno de puertas donde tras cada puerta hay una sorpresa que no tiene nada, o muy poco, que vez con la anterior. Y es que cada trabajo discográfico de Los Estaques navega por un sonido diferente, desde el pop más psicodélico, marca de la casa, hasta el Funky o el rock más desacomplejado. 

Mientras medio mundo vuelve su mirada al nuevo trabajo de Rosalía, yo me quedó embobado con el crossover entre Los Estanques y el Canijo de Jerez, alma máter de la mítica banda, Los Delinqüentes. Un binomio musical que nadie vio venir, máxime cuando hace relativamente nada publicaron un elepé a medias con Anni B Sweet, Burbuja cómoda y elefante inesperado. Charlo con Iñaki Bregel, uno de los fundadores de la banda y voz de sus letras, por su participación en el festival Sixties Rock Weekend el 31 de octubre y el 1 de noviembre en La Bohemia.

Hace poco Los Estanques sacaron nuevo álbum, Lágrimas de plomo fundido junto a El Canijo de Jerez. Un elepé explosivo que viaja desde el Funky de Fumata Grupal hasta el rock más contundente de Estamos listos para golpear. Antes de la publicación del disco ya habían sacado un tema conjunto, El murmullo de los perros. "Yo sabía que él andaba al quite – revela, Iñaki - porque alguna vez por redes sociales había comentado. Y dije: le voy a tirar la caña, a ver si nos hacemos un tema, y me mandó una maqueta que tenía él y yo le di caña al resto del tema". 

La canción funciona muy bien, pero en la actualidad estas colaboraciones suelen ser puntuales, no es habitual que salgan discos colaborativos., pero es que Los Estanques no siguen las modas. "Con el Canijo nos llevamos de puta madre y quedamos para hacer un tema, luego otro, y había tan buen rollo que hacer un disco, la promo, meternos en una furgoneta pues era pan comido. Hubo magia", dice. Es evidente que la música que producen Los Estanques pega casi con cualquier artista, y El Canijo es uno de los más grandes que tenemos, así que, ¿por qué no?, eso sí, unir dos mundos, aparentemente alejados, puede ser complicado. "El Canijo aportó las letras y las melodías. La primera se la envié de vuelta (El murmullo de los perros) pero el resto ya fue todos estando en el mismo lugar", comenta.

Un disco que combina varios géneros musicales

Como he dicho, en el disco, una vez más, encontramos varios géneros musicales, porque la música está al servicio de la letra y no al revés.  "Había canciones que El Canijo tenía claras como Listos para golpear para que fuera un rock, pero había canciones más abiertas y fuimos añadiendo los ritmos y las armonías, y fueron dando diferentes resultados. Y tratamos de que fuera en concordancia con las letras, que la imagen que te traiga la música tenga que ver con la canción". 

Viajamos un poco al pasado, justamente al inicio de la banda, a la casa de Iñaki, donde creó unas canciones que fueron el germen de Los Estanques.  "Nace porque yo grabo un par de canciones en casa, Cuantos valles y Viento en pompa, que son del primer disco, y se los envié a Borja Juanco, que era el bajista que empezó conmigo. Y entre los dos grabamos el primer disco, él al cargo de la producción junto a mí, y yo de los instrumentos y de la composición de la letra y música. Para poder tocar en directo, tiramos de amigos, de un grupo de progresivo Crayolaser". Iñaki lidera Crayolaser, una banda progresiva con discos como This is the Batiscaf (2011) o Crayolaser (2013) antes de crear Los Estanques.

El primer disco de Los Estanques, Contiene percal (2017) es autoproducido y compuesto y grabado por Borja Juanco y el propio Iñigo. "Nos sale querer hacer algo más pop, porque veníamos de una banda de progresivo, que era Crayolaser y con sonido más setentero. El primer disco lo grabamos entre Borja y yo. Lo que fue la semilla de esta banda fue el pop setentero". Le señalo que también hay rock setentero en sus discos, e incluso algo muy zeppeliano en los títulos de sus discos con los números romanos. Sonríe. "Quien dice pop setentero, dice rock setentero y dice de todo, lo último que hemos utilizado es pop libre, que todo puede caber; al final, es rock, es progresivo, todo lo que quepa en cuatro minutos". 

Foto: Sergio Albert

En su segundo álbum, II, Iñaki vuelve a ocuparse de prácticamente todo. "Los discos los he ido grabando yo", comenta. "La banda lo que ha hecho, sobre todo, lo que ha hecho es tocar en directo, no nos hemos preocupado quién grababa qué, porque hemos primado el grabar. Con esto no quiero decir que no seamos una banda; al final, todos nos montamos en la furgoneta, todos tiramos para adelante y, vamos, Los Estanques no sería nada sin los cuatro. En todos los discos están todos en algo, pero el que corre con la mayoría de los instrumentos soy yo". 

En su tercero álbum homónimo, Los estaques imprimen a sus canciones más música negra "Borja Juanco me estuvo dando mucha caña con la música negra, y cuando entró Germán también. Tratamos de utilizar ese lenguaje para decir nuestro mensaje, con otro envoltorio, pero para lanzar nuestro mensaje", dice. 

Convenimos durante la charla que la música es un medio para enviar un mensaje, aunque en ocasiones el mensaje únicamente sea sonoro. "La música es un lenguaje, es una definición que me encaja bastante bien, es un lenguaje en sí mismo que no depende de la palabra, por eso tiene magia", señala. "En este caso cuando tiene letra y acompaña la música, entramos en otro juego; dos lenguajes para poder expresar un mensaje". 

Un día en Madrid a Iñaki le robaron, algo que le puede suceder a cualquiera, pero lo que le robaron fueron meses y meses de trabajo en estudio, y no solo material de Los Estanques. El disco IV desapareció hurtado en la capital; algún quinqui vendería el disco duro por cuatro chavos; por suerte, Iñigo no desfalleció. "Fue el 16 de febrero de 2019, esa fecha no se te olvida", dice con seriedad. "Lo que pasó es que me robaron la mochila con el disco duro con todo lo que había hecho en un año y medio que llevaba en Madrid, discos que tenía producidos de otra gente. El disco IV lo tuve que regrabar totalmente". 

En 2011 unos ladrones entraron en la casa de los vecinos de Enrique Bunbury, y en su huida se colaron también en el estudio del cantante, le robaron el ordenador y con éste su disco Licenciando Cantinas. El aragonés no sucumbió y regrabó el disco, Iñaki hizo lo mismo. "Como había llegado a Madrid, tenía 26 años y tenía ganas de todo, estaba motivado con la vida, me sentía vivo, volví a regrabar todos los discos que me robaron de toda la gente que estaba produciendo, por supuesto sin cobrarles todas las sesiones", explica. "Y en el caso del IV recuperé todo, menos tres o cuatro canciones, y hace poco las estoy echando en falta, pero ya no las recuerdo". Aquello pudo, seguramente, repercutir en la forma y estructura de las canciones, no eran exactamente las mismas que estaban en ese disco duro robado las que terminaron publicándose, siempre se cambian matices. "Creo que al final mejoró, me pillé otro ordenador, porque me lo robaron todo, me pillé otras tarjetas de sonido y di un salto de calidad". 

Y llegó un disco que los llevó a un mayor público. Indudablemente una obra maestra de sensibilidad y rock progresivo setentero. Burbuja cómoda y elefante inesperado con Anni B Sweet es una maravilla de principio a fin, con sus trece canciones, algo típico en Los Estanques. Su primer corte, He bebido tanto (que) es un tema luminoso, emotivo, con esa voz increíble de la malagueña y una enorme sensibilidad o también se puede destacar, Tu pelo de flores que os devolverá a los 70 con un flow que te hará levitar, mucho más psicodélica que la anterior. "Sabíamos que Anni nos seguía y le tiramos la caña y lo mismo que con El Canijo". 

Los Estanques rompen moldes, ahora mismo están embarcados en dos tipos de giras, o dos propuestas musicales para sus conciertos, llámenlo como quieran. Por un lado: una gira solo con las canciones de Los Estanques y la presentación de Uve (el último disco de la banda en solitario), y otra gira con el álbum con El Canijo "Con Estanques solo lo que hacemos es tocar el repertorio de Estanques y el Uve, y con El Canijo tocamos el disco y un par de temas de Estanques junto con El Canijo, que le da su rollo, y un tema de Los Delinqüentes y otra de El Canijo de Jerez pasado por la psicodelia de Estanques".

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