VILA-REAL (EFE). El Villarreal, que se impuso al Osasuna por 2-1 en La Cerámica en Liga, suma de esta manera por victorias sus compromisos ligueros ante su afición lo que supone igualar el mejor arranque como local de su historia.

El conjunto dirigido por Marcelino remontó un partido que se le puso de cara con la expulsión del osasunista Rosier pero que se complicó con el gol de Ante Budimir de penalti antes del descanso. En la segunda mitad, las dianas de Georges Mikautadze y Pape Gueye le dieron la vuelta al marcador.

Un triunfo que se suma a los conseguidos en los dos primeros enfrentamientos ante el Girona (5-0) y el Oviedo (2-0) e iguala a los arranques firmados en las campañas 2015-2016, también con Marcelino García en el banquillo, y en las 2010-2011 y 2008-2009.

La última vez que firmó tres triunfos se impuso al Espanyol y el Athletic por 3-1, en ambos casos, y al Atlético 1-0 mientras que cayó ante el Celta (1-2) en el cuarto envite.

Algo parecido le ocurrió en la 2008-2009 pero entonces la racha se rompió por un empate a cuatro frente al Atlético de Madrid.

En la 2010-2011 la serie de triunfos se extendió hasta las cinco victorias y se truncó con un empate frente al Valencia (1-1).