VILA-REAL. Al pie del Parque Natural de las Sierras de Córdoba, la pequeña localidad de Lucena recibía con mucha ilusión al Villarreal, en la primera fase de la eliminatoria de la Copa del Rey. Entre cánticos de "¡Sí se puede, sí se puede!", la afición entraba en calor en una noche muy fría en el norte de Andalucía.
La primera parte del Submarino, que salía con prácticamente todos los titulares, fue de menos a más. Un inicio algo gripado que se solucionó mediante dos goles casi consecutivos de Olowaseyi.
El Lucena demostró un gran carácter y un alto nivel de juego combinativo, a pesar de que pagó caro tener las líneas tan arriba. Aun así, han demostrado una personalidad única, quitándose la capa de "equipo pequeño".
Sin sorpresas para Marcelino, en el Estadio Ciudad de Lucena, habiendo dejado a varios efectivos en casa y dando oportunidades a todos sus hombres, incluso a los menos habituales.

- Foto: VILLARREAL CF
El Lucena, valiente con su propuesta de juego, no puede evitar los dos tantos de Tani
Arrancó la primera parte con el Villarreal muy frío, algo inexacto, pero era cuestión de minutos que estos empezaran a combinar mejor. Es algo común en la primera fase de la eliminatoria de la Copa del Rey, donde el equipo "grande" sale algo desentonado, ya sea por la falta de esfuerzos o por el gran contraste que tiene con un partido de la Champions.
Sin ser un partido de la máxima europea, los cordobeses han tenido claro su juego, con las líneas muy juntas, pero lejos de ese equipo encerrado atrás. Durante los momentos de entrada en calor del Submarino, el Ciudad de Lucena aprovechó para jugar y combinar con un gran nivel de precisión.
En la primera parte, el ariete Tani ha sido un dolor de cabeza para José y Rafa, los dos hombres de atrás del Lucena. El canadiense ha estado atento todo el rato y ha podido marcharse en carrera varias veces. En esas jugadas, los celestes pagaban caro adelantar tanto las líneas, ya que les tocó replegar en varias ocasiones, dejándose todo el cardio en el inicio del partido.
La primera ocasión la tuvo el Villarreal, con un remate de Ayoze al larguero, completamente libre de marca, pero algo impreciso el andaluz en este partido, que las tuvo de varias formas, pero Froi, el guardameta local, le dijo claramente que no sería tan fácil.
Justo en ese momento, y mediante la misma receta de buscar con un pase largo al delantero, llegaron los dos goles de Tani. El primero en el minuto 15, con una gran asistencia entre líneas de Ayoze (0-1). El segundo tanto llegaba tras una gran jugada en solitario de Solomon, que le entregaba un pase preciso al de siempre. La mandó a la escuadra sin dudarlo, en una jugada donde los celestes no habían podido recoger rápido las líneas, por lo que no había nadie más que el ‘groguet’ y Froi en esa jugada.
El portero del Lucena, sin duda, ha sido el hombre de la primera parte por parte de los locales. Paró oportunidades de gol muy claras a Gueye, Solomon y Ayoze en repetidas ocasiones.
El Villarreal ha hecho lo que se esperaba y el Lucena ha sorprendido en la faceta combinativa. Sin duda, la afición local ha terminado más que contenta con el desempeño de los suyos.

El Submarino termina de conectar y golea
En la reanudación, Marcelino movió el banquillo. Mikautadze entraba por Ayoze y en la primera que tuvo ya buscó portería. No se lo piensa. El georgiano encaró, levantó la cabeza y probó fortuna. Aviso serio.
El control era total y el premio no tardó en llegar. Tras varios intentos y rechaces en el área, Ilias cazó el balón en la frontal y soltó un zurdazo imparable.
El Lucena, a pesar del desgaste, siguió presionando arriba. Cada balón dividido era una ovación. Ya sin piernas, los celestes corrian tras el balón con esfuerzos sacados del alma. Una oportunidad para todos de disfrutar y de medirse ante un equipo de Primera.
Una gran noche para Tani, que siguió corriendo y peleando. El canadiense se movió entre líneas, arrastró marcas y dejó espacio para las llegadas de Solomon, siempre conectado. Tanto fué la conexión de los dos que en el 70 llego su hattrick.
El Lucena todavía tuvo una más. Canty, incansable, ganó la lucha a Rafa en el minuto 76, chutó con potencia directo al travesaño. Medio estadio gritó el gol. Fue la ocasión más clara para los locales, que se quedaron a centímetros de un premio merecido.
Un córner desde la derecha, tres rebotes en el área y un balón perdido que llega al georgiano, que la orienta con calma antes de soltar un disparo seco al fondo de la red.
Continuó la fiesta del gol en el 84. Los celestes protestaban porque había un jugador en el suelo por un tirón, pero Santi no lo vio. Seguía la jugada, mano a mano con Froi, y la definió sin dudar Comesaña.
Se marchaba Manu Molina, muy adolorido del cuádriceps. Con uno menos el Lucena, sin cambios disponibles, cerraban el partido con más corazón que fuerzas.
El Villarreal terminó el encuentro muy cómodo, dueño del balón y del ritmo. Marcelino aprovechó para dar minutos, los suyos para disfrutar. Enfrente, un Ciudad de Lucena que se despide con la cabeza alta y la ovación de su gente. Una noche de Copa que no olvidarán en mucho tiempo.
Ficha técnica
0 - Lucena: Froilán, Alejandro Benitez (Martín), Manuel Ortiz (Jaime Ortiz), Manuel Molina, Agudo (Canty), Ignacio Fernandez © (Espejo), Jose Perez, Jose Cruz, Hugo Fuentes (Aponte), Castilla y Álvaro Toledano.
6 - Villarreal: Diego Conde, Altimira, Rafa Marín, Pau Navarro, Cardona (Pedraza), Solomon (Hugo López), Parejo © (Thomas), Ilias Akhomach, Gueye (Comesaña), Tani y Ayoze (Mikautadze).
Goles: 0-1, min. 15: Tani. 0-2, min. 17: Tani. 0-3, min. 70: Tani. 0-4, min. 60: Akhomach. 0-5, min. 81: Mikautadze. 0-6, min. 84: Comesaña.
Árbitro: Jesús Gil Manzano (Comité extremeño). Amonesto de amarilla a Jaime Ortiz, por parte del Lucena.
Contexto: Partido de la elimintoria de la Copa del Rey, en el Estadio Ciudad de Lucena.