CASTELLÓ. En las instalaciones deportivas del CD Jérica tendrá lugar el Campus RGM. Durante tres días, jóvenes talentos de la provincia de Castellón y de toda España podrán entrenar y aprender bajo las indicaciones de un referente del fútbol valenciano: Fernando Gómez Colomer. Una persona ligada al fútbol en todos los ámbitos que lo conforman. Fue jugador del CD Castellón, del Valencia CF y de la Selección Española de Fútbol. Su vínculo con el deporte después de su etapa sobre el verde va desde los despachos, como director deportivo del Castellón, hasta una etapa como entrenador en la tercera RFEF. Además, suma varias aportaciones en programas deportivos como narrador y como voz autorizada del deporte rey.
En exclusiva para Castellón Plaza, Fernando decide hablar de su llegada al campus y de su intención de reengáncharse a un proyecto que le "motive".

- Fernando saludando a Diego Armando Maradona en un partido.
— ¿Cómo te surge esta oportunidad de participar en el campus RGM?
— Surgió la posibilidad de poder entrenar en un equipo en el extranjero. Estuvimos negociando, viajando, hablando… y finalmente no salió, pero tuvimos ese contacto más cercano (el propio Fernando con Juanjo, el organizador de RGM). Desde entonces hemos mantenido muy buena relación: hemos viajado juntos, coincidido en concentraciones, y de vez en cuando hablamos.
Me comentó que tenía la idea de montar este campus de tres días en navidad y que le gustaría que yo llevase la parte deportiva con los chicos. Le dije que sí, que ahora mismo no estoy comprometido con ningún club de forma exclusiva, y que me encantaba la idea de compartir esta experiencia con él. Así surgió todo y así se ha dado.
— ¿Qué te motivó a engancharte al proyecto cuando te dijeron: "Oye, tengo esta propuesta de un campus de tres días"? ¿Qué nace en ti?
— Bueno, eso es algo natural. Sabía que algo así podía pasar, y así fue. La verdad es que me ha costado volver a encontrar un equipo donde desarrollar mi trabajo de forma exclusiva, así que mientras tanto voy haciendo cosas para mantener la actividad. Una de ellas fue esta oportunidad: lo charlamos, me lo propuso, y le dije que sí.
Mientras no sea algo que me obligue a una dedicación exclusiva, voy haciendo cositas: estoy entrenando a un grupo de chavales en la Academia CIA, en Enguera, los miércoles y viernes un par de horas por semana. También mantengo contacto con el fútbol a través de medios de comunicación —prensa, radio y televisión—, así que sigo vinculado al mundo del fútbol, a la espera de que surja algo que requiera esa dedicación total.
— En relación con el campus, dos de los pilares son crear un espacio de competencia y también de detección de talento. Desde tu experiencia profesional, ¿cómo funcionará tu "ojo" ? ¿Qué puede aportar Fernando Gómez al fútbol a través de este proyecto?
— Yo lo que puedo hacer es darles indicaciones generales para que las apliquen en el campo, tanto a nivel de comprensión del juego como de entendimiento de la idea futbolística. Dependerá mucho de cada jugador, de su posición, y de lo que vaya observando en los entrenamientos y en los partidos. Las correcciones serán sobre aspectos generales de su juego.
Seguramente haremos también una charla para preparar el partido del último día. Pero en tres días, lógicamente, no se puede transformar a un jugador; lo importante es mantener la actividad y hacerlo en un entorno ideal, en unas instalaciones estupendas. Además, los padres podrán acompañarles y participar en actividades paralelas, lo que me parece una gran idea. Mi intención es ayudar, corregir y orientar a los chicos en lo futbolístico, pero también hablarles de valores, de su desarrollo personal y de lo que puede ser su vida dentro o fuera del fútbol. Aprovecharemos esos tres días para guiarles un poco y disfrutar de la experiencia.
— Tanto para un futuro equipo como para los asistentes al campus, ¿qué mensaje dejarías? ¿Qué pueden esperar tus jugadores de ti?
— Que se lo van a pasar bien. Todos los entrenamientos serán con balón, dinámicos y divertidos. Las tareas estarán adaptadas al nivel de los futbolistas que vengan, así que disfrutarán mucho.
Si además aprenden algo provechoso para mejorar, mejor todavía. Pero lo principal es pasarlo bien tres días, disfrutar del fútbol en un entorno fantástico y compartirlo con sus padres y compañeros.
— Comentabas que has estado en contacto con el fútbol todo este tiempo. ¿Cómo lo has vivido? Los cambios son grandes: de un banquillo a un rol más directivo o mediático. ¿Cómo es ese sentimiento para ti?
— Lo he vivido bien, porque me gusta seguir vinculado al fútbol desde distintos ángulos. Desde que me retiré, en el año 2000, he estado siempre conectado a los medios de comunicación cuando no trabajaba en exclusividad con un club. He entrenado al Dénia, donde guardan buen recuerdo, y ahora colaboro con esa academia de la que te hablaba. También sigo los partidos de Tercera División y Segunda RFEF, por si algún equipo se anima a contar conmigo. Mantengo la visión del fútbol en todas las categorías, porque nunca se sabe cuándo puede surgir una oportunidad. Y sigo con la ilusión de volver a incorporarme a un proyecto que me motive de verdad. No me cuesta adaptarme; me gusta opinar y analizar el fútbol. Cualquier cosa que me mantenga activo y cerca de este mundo, para mí, es lo principal.
— En un rango de importancia, ¿lo que más echarías de menos serían los banquillos?
— No, yo siempre fui director deportivo, aunque también probé como entrenador. Ahora mismo en España se me contempla más como director deportivo, sobre todo de Segunda RFEF para arriba. La experiencia como entrenador me ha encantado y ha sido muy valiosa, aunque quizá en el extranjero se me vería más como entrenador. Comencé tarde a entrenar y no tengo demasiada experiencia, pero lo compenso con conocimiento. Gracias a Dios, me ha ido bien y es una pena no haber entrenado más en mi trayectoria.