BARCELONA. Noche gélida, típica de la ciudad condal en pleno invierno, pero con un ambiente calentado por la afición perica. Se preparaba el escenario para que el Villarreal se enfrentara al Espanyol de Barcelona.
Marcelino y los suyos llegaban con ganas de superar el tropiezo europeo sucedido ante el Pafos y, sin dudas lo consiguieron, en un partido que fue de menos a más.
El Submarino empezó sufriendo mucho ante un Espanyol que recuperaba y molestaba en todas las fases del juego. Un par de ajustes tácticos corrigieron el hueco que dejaban los de Marcelino en el centro del campo. Cuando el Villarreal más dominaba, llegó el gol de Gerard, que sirvió para culminar el trabajo.
La segunda parte pintó más de amarillo que de blanquiazul. El Espanyol bajó los brazos ante un once punzante y rápido. El gol de Moleiro sirvió para cerrar un gran partido del Villarreal.
- Gerard Moreno, pidiendo perdón a su exequipo, en el RCDE Stadium. Foto: LALIGA
Un Villarreal, venido a más, culmina la primera parte mediante la 'ley del ex' con un gol de Gerard
El Submarino empezó la primera parte bastante por debajo del umbral de juego que propuso el Espanyol.
Los pericos comenzaron con mucha fuerza y, durante gran parte del primer tiempo, sometieron a todo un equipo que, en ciertos momentos, se veía aturdido.
Un error grave por parte de los hombres de Marcelino fue dejar demasiado aire entre los delanteros y los pivotes, con espacio para que los pases hacia Urko y Pol Lozano se produjeran ante la mirada de un Partey algo frío. El míster lo vio claro: sus gestos indicaban a Buchanan y a Comesaña que saltaran a ese espacio.
Renato se convirtió en el generador de pases al hueco ante la falta de precisión de los extremos.
En varias ocasiones, Luiz tuvo que intervenir. El brasileño estuvo muy atento e intenso en sus tareas.
A pesar de que los 'groguets' lograban tocar, apenas profundizaban. En ese momento llegó un cambio táctico que le dio un vuelco al partido: Gerard bajó a recibir más a menudo, mientras Comesaña aparecía con mayor frecuencia entre líneas.
El propio Santi fue el mejor de esta "segunda parte dentro de la primera mitad". Mientras ejercía de director de la sala de máquinas, el equipo volvía a ganar espacio, de la mano de un muy correcto Pedraza y un Buchanan algo más acertado.
Una volea de Gerard dentro del área fue el aviso de la mejora ofensiva del equipo, pero El Hilali se lanzó con todo para evitar la intervención de Dimitrovic.
Mediante la búsqueda constante del ex del Espanyol y de Tani con los centros desde las bandas, el poderío en el área rival iba en aumento.
Cerca del ecuador del partido, en el minuto 43, Gerard encontraba portería con un tiro escorado que esquivó a toda la defensa y a Dimitrovic, que no pudo hacer mucho con su estirada. La ley del ex se cumplió poco antes del pitido, en una primera parte donde el Submarino fue de menos a más, hasta encontrar la portería.
- Moleiro celebrando su gol ante el Espanyol. Foto: VILLARREAL
La velocidad y el acierto compensan al Submarino con otro gol de Moleiro
Ni el frío de Barcelona pudo apagar a este Villarreal, que salió serio y ordenado a enfrentar la segunda parte.
El Espanyol, por su parte, estaba fuerte. Pere Milla remató el primer intento de gol de la segunda parte, en la única jugada de peligro que se recuerda.
Un Villarreal que saltó al campo con mucha contundencia. Hombres como Moleiro o Renato no perdonaron ningún balón, además de que los once sobre el verde se lanzaban a por cada pelota que tocaban los hombres de Manolo González.
El trabajo defensivo dio sus frutos de la mejor manera. Tras una recuperación colectiva y un pase al espacio para Buchanan, este sirvió un centro perfecto que Moleiro remató de primeras. Dimitrovic detuvo el disparo con una intervención espectacular, pero el balón volvió al canario, como si el gol estuviera destinado a ser suyo. Esta vez, solo tuvo que empujarla para coronar con broche de oro una gran jugada de equipo.
El Submarino completó una segunda parte sólida, controlando el centro del campo y evitando los desajustes que tanto habían penalizado a su defensa en el primer tiempo.
Un palo de Gerard, en un momento de auge del Villarreal, provocó un silencio en el estadio, que casi lamentaba el tercer gol. Todo nació de una jugada excelente de Pedraza, que firmó un partido de nivel excelente.
En un momento de máxima comodidad, se veía al equipo de Marcelino transitar muy bien en todas las partes del verde. En el minuto 70, y a raíz de esa buena transición, Comesaña desenfundaba un tiro desde la frontal del área, en una jugada que se sucedió en un abrir y cerrar de ojos.
Todo el equipo se redimía del golpe de Champions haciendo lo que mejor se le está dando esta temporada: ganar y luchar por el podio.
Ficha técnica
0 - Espanyol: Marko Dmitrovic; Omar El Hilali (Rubén S.), Fernando Calero, Leandro Cabrera ©, José Salinas; Tyrhys Dolan, Pol Lozano (Kike), Urko González (Miguel Rubio), Edu Expósito (Pickel), Pere Milla (Jofre Carreras); y Roberto Fernández.
2 - Villarreal: Luiz Júnior; Pau Navarro, Rafa Marín, Renato Veiga, Alfonso Pedraza; Tajon Buchanan (Akhomach), Thomas Partey, Santi Comesaña (Gueye), Alberto Moleiro (Cardona); Tani Oluwaseyi (Ayoze) y Gerard Moreno © (Pépé).
Goles: 0-1, min. 43: Gerard. 0-2, min. 57: Moleiro.
Árbitro: Alejandor José Hernandez (Comité canario). Amonestó de amarilla a Buchanan y Pau Navarro, por parte del Villarreal.
Contexto: Partido de la jornada 12 de LaLiga EA Sports, en el RCDE Stadium, ante 29.540 espectadores.
