VILA-REAL. En términos futbolísticos, el verano es tiempo de ventas y fichajes. Grandes operaciones que ilusionan a unos seguidores y decepcionan a otros, que inundan portadas y horas de radio y televisión… Pero hay otro capítulo que da tanto trabajo o más a las direcciones deportivas: decidir qué hacer con los futbolistas que regresan de sus cesiones en otros clubes. Una carpeta que, en el caso del Villarreal en estos momentos, cuenta con muchas páginas por resolver.
En concreto, hasta nueve jugadores amarillos se encuentran en esa situación, seis de los cuales con aspiraciones de formar parte de la plantilla de Marcelino García Toral la próxima campaña. De todos ellos, el caso más paradigmático es, sin duda, el de Arnaut Danjuma. Después de que el Submarino pagara 24 millones por él en 2021 y de que completara una notable primera temporada como groguet, el neerlandés ha ido encadenando cesiones con poco éxito.
Se busca salida para Danjuma
Tras pasar a préstamo por las filas de Everton, Tottenham y, este último curso, Girona, Danjuma está citado el 11 de julio para empezar la pretemporada con el resto de sus compañeros. No obstante, sus problemas de actitud y sus diferencias con varios pesos pesados de la plantilla invitan a pensar que Miguel Ángel Tena y Roig Negueroles estarán buscándole una salida definitiva para poder recuperar parte de la inversión antes de que su contrato finalice en 2026.
No tan definido parece el futuro de Ramon Terrats, que ha firmado una gran segunda vuelta cedido en el Getafe. Su paso por la capital a las órdenes de Bordalás ha dejado un fántastico sabor de boca (4 goles, 1 asistencia y clave en la salvación de los azulones), pero en Vila-real el barcelonés no tiene asegurado ni mucho menos ser protagonista. Comesaña, Gueye y Parejo parten con ventaja en su posición, sin tener en cuenta que se podría fichar a otro futbolista para reforzar la medular. No obstante, la juventud y el crecimiento de Terrats, unido a que la próxima campaña el Villarreal disputará tres competiciones, podrían ser argumentos que lleven al club a incluirlo en sus planes.
Situación similar a la de Terrats es la que vive Carlos Romero. El lateral izquierdo de Torrent ha cumplido con nota esta temporada en su cesión en el Espanyol, manteniendo la titularidad durante todo el curso y demostrando que tiene capacidad de sobra para rendir en Primera División. Ahora bien, en su mismo puesto el Villarreal cuenta con dos baluartes como Sergi Cardona y Alfonso Pedraza. Por tanto, si ambos continúan en la plantilla de cara al año próximo, el club debería buscar a Carlos Romero una salida, bien en forma de traspaso o bien en forma de una nueva cesión.
En el otro lateral, el derecho, Adrià Altimira regresa de su préstamo en el Leganés. Aunque no ha sido tan indiscutible como Carlos Romero en el Espanyol, el de Cardedeu también ha mostrado su potencial y su capacidad para ser parte de una plantilla de la máxima categoría. Lo que está por ver es si ha convencido a un Marcelino García Toral que, en todo caso, necesita reforzar esa posición en la que, ahora mismo, sólo cuenta con Kiko Femenía. Un Femenía que, además, no tiene para nada asegurada su continuidad. Por tanto, Altimira podría postularse como una opción para partir como lateral derecho suplente, rol al que también aspira Pau Navarro.
Pasando a la zona ofensiva, otro nombre sobre el que deberán decidir los amarillos es el de Pau Cabanes. Después de dejar buenos minutos en sus apariciones durante la primera vuelta, el de Burriana no ha tenido una buena experiencia en su cesión al Alavés: tan solo ha disputado 186 minutos repartidos en seis partidos, por lo que no ha tenido la oportunidad de seguir desarrollando su fútbol en Vitoria.
Cuatro cedidos en Segunda División
En cambio, sí han contado con una buena cuota de protagonismo dos de los groguets cedidos a equipos de Segunda División. Uno de ellos es Jorge Pascual, que ha anotado cinco goles y repartido dos asistencias en 41 partidos con la SD Eibar. Rendimiento similar al de Álex Forés en el Levante, que en sólo media temporada ha marcado 5 goles y dado una asistencia en 18 encuentros.
Menos fortuna han tenido Carlo Adriano y Gerard Hernández, que apenas han jugado en Mirandés y Elche respectivamente. El destino de ambos parece estar en el Villarreal B de David Albelda, aunque otra solución podría ser darles salida de nuevo en forma de cesión. En todo caso, son muchas las carpetas en las que debe trabajar la dirección deportiva del Villarreal en cuestión de cedidos, y de las decisiones que se tomen en este sentido pueden depender otras en forma de ventas o fichajes.
