CASTELLÓ. Cuando el Castellón anunció, en verano, el fichaje de Marc-Olivier Doué, subrayó en su comunicado que incorporaba "un centrocampista defensivo con buen trato de balón, hábil en el juego aéreo y un buen posicionamiento sobre el verde".

Cinco meses después, el futbolista francés ha añadido una cualidad que ha sido todo un descubrimiento: su olfato goleador. El bordelés ha visto puerta en dos ocasiones, lo que iguala su mejor registro, logrado en la temporada 2021/22 en la Segunda División belga. Y dispone de más de media temporada para superarlo.

No obstante, hay que poner en valor la importancia de esos tantos, ya que han ayudado a ganar partidos que se habían puesto cuesta arriba. El mediocentro logró convertir estas dianas entrando en la segunda parte y con su equipo empatando o perdiendo. Gracias a sus anotaciones, los albinegros se llevaron el triunfo en ambos partidos.

El primer gol de Doué como albinegro se produjo en la inolvidable remontada firmada ante el Málaga en el descuento. El francés había ingresado en el terreno de juego del SkyFi Castalia en el inicio de la segunda parte, cuando el partido registraba un empate a cero. Al rato de entrar, el equipo andaluz marcó tras un polémico penalti indicado en área albinegra, lo que obligó a los orelluts a remontar. Ousmane Camara anotó el 1-1 en el descuento y Doué convirtió el tanto de la victoria en el último suspiro. 

El francés lo celebró con tanta efusividad que el árbitro le mostró tarjeta amarilla por quitarse la camiseta. Era la segunda, lo que acarreaba la expulsión. La alegría del futbolista tenía su justificación: llevaba casi tres años sin marcar en un partido oficial y el gol que rompió esa sequía fue, seguramente, el más importante de su carrera hasta ese momento.

El segundo gol, en Riazor

No tuvo que esperar tanto tiempo para volver a ver puerta, ya que un mes después, en Riazor, anotó de un potente zapatazo desde fuera del área el gol que ponía el 1-1 provisional frente al Deportivo. Llevaba solo un minuto en el terreno de juego y esa anotación fue el primer paso hacia una remontada que se concretó poco rato después. 

Así las cosas, Doué se ha convertido, contra pronóstico, en un hombre diferencial para el Castellón de cara a puerta, algo que los albinegros han aprovechado para engordar su cuenta de victorias y situarse en la zona alta de la clasificación.