CASTELLÓ. El partido del pasado sábado frente al Mirandés dejó una buena noticia para el Castellón con el regreso a los terrenos de juego de su capitán, Salva Ruiz, que jugó los 20 últimos minutos del encuentro y puso fin a una inactividad competitiva de tres meses.

El defensa vio la luz al final del túnel después de romperse frente al Éibar a los 12 minutos de partido. Aquel 15 de febrero, Salva Ruiz fue una de las novedades de Johan Plat en el once inicial, dejando en el banquillo a Jozhua. Pero su presencia en el campo fue fugaz debido a una lesión en el isquiotibial que le obligó a pedir el cambio justo el día en que recibía un reconocimiento por alcanzar los 100 partidos con el Castellón.

Se iniciaba un tormento para el capitán que finalizaría la pasada semana con su vuelta a la competición en Anduva. El valenciano volvió a sentirse futbolista tras superar una nueva lesión en un año especialmente aciago para él en este apartado.

Y es que su campaña ya empezó torcida debido a una dolencia física que arrastraba de la pasada temporada y que le impidió jugar los ocho primeros partidos del curso actual. Al jugador albinegro le costó entrar en ritmo después de una ausencia tan prolongada y sin pretemporada de por medio. Pero fue evolucionando según avanzaba la competición y acabó haciéndose con un sitio en el once, registrando diez titularidades en el torneo de la regularidad y otra en Copa antes de volver a lesionarse.

Una opción más para la defensa

Con la vuelta de Salva Ruiz, el Castellón recupera una pieza importante en la fase decisiva de competición en una línea en la que los albinegros no andan muy sobrados de efectivos, lo que eleva aún más su relevancia.

Además, el valenciano es polivalente en la línea defensiva, toda vez que, siendo lateral izquierdo, ha actuado también como central y como hombre de banda derecha, por lo que ofrece varias soluciones a Johan Plat. “Estoy muy contento de su vuelta. Es nuestro capitán y es un jugador muy importante para nosotros”, ha comentado el técnico tras el partido frente al Mirandés.