CASTELLÓ. Si el año pasado el Castellón registró su peor sequía de victorias en décadas en un arranque de temporada, este curso está ocurriendo lo mismo en el apartado de derrotas. El equipo albinegro no ha perdido ningún partido en siete jornadas, algo que puede parecer una anécdota, pero que supera claramente ese término al comprobarse el tiempo que ha transcurrido desde la última vez que ocurrió eso.

Los albinegros no habían tenido un arranque de Liga tan pulcro en ninguno de sus dos últimos ascensos: Segunda B (2017-18) y Segunda A (2004-05). Tampoco lo lograron el año en que se proclamaron campeones de grupo en Tercera División (2014-15). 

Para encontrar un registro de esta envergadura hay que remontarse a la temporada 2002-2003, la primera de José Luis Oltra al frente del banquillo albinegro. En aquel curso, el Castellón, que jugaba en Segunda División B, no solo consiguió mantener el invicto en las siete primeras jornadas, sino que lo prolongó hasta la 30, logrando un récord histórico en el fútbol español. 

La racha se rompió ante el Hércules, que se impuso en Castalia por 1-2, poniendo fin a siete meses de invencibilidad de los albinegros. Aquel Castellón terminó primero de grupo con muchas jornadas de antelación y disputó los play off de ascenso, donde perdió en la final ante el Ciudad de Murcia. 

El Castellón de Óscar Cano no aspira a una gesta como aquella, pero ya puede presumir de registrar una racha que no se había visto en diecisiete años. Este domingo intentará prolongarla ante el Ejea.