VALÈNCIA. El sufrimiento de los trabajadores de la compañía tecnológica Jeff sigue alargándose tras retrasarse los juicios por los impagos con la entrada en concurso de acreedores. El pasado mes de mayo, el juzgado de lo mercantil número 2 de València declaraba a la compañía como insolvente tras diez meses de no pagar los sueldos a los trabajadores y una ronda de 83 millones de euros fallida. Ahora, con el nuevo escenario, trabajadores que tenían juicios pendientes por lo social para dirimir la situación han visto aplazados sus litigios en los juzgados tras el cambio de gestor. 

PKF Attest Concursal SLP, que fue el administrador concursal elegido para sacar a la empresa del atolladero, ha decidido aplazar los juicios al considerar que han tenido poco margen para estudiar la información. "Una vez que se declara el concurso el 19 de mayo de 2023, los demandantes deben de ampliar sus demandas a la Administración Concursal y lo que ha pasado en estos primeros momentos del concurso es que dichas ampliaciones llegan casi al mismo tiempo que la celebración de los juicios", señalan desde el despacho.

En este sentido, apuntan que, al no transcurrir el tiempo mínimo establecido en la Ley Reguladora de la Jurisdicción Social para que la Administración Concursal pueda disponer de toda la información y documentación de las respectivas demandas, los juicios se suspenden, procediendo el juzgado a establecer nuevo señalamiento. Unas nuevas citas que, según explican trabajadores, podrían alargarse hasta el próximo mes de enero. 

A la espera de los juicios para ir al Fogasa

"A día de hoy se siguen recibiendo señalamientos. El concurso se encuentra en su fase común. Ahora se están recibiendo comunicaciones de créditos de acreedores, en respuesta a la circularización realizada por esta Administración Concursal a los mismos para que comuniquen sus créditos y así después confeccionar el listado de acreedores en el Informe Provisional", continúan. Mientras, los trabajadores tendrán que esperar para poder acudir al Fogasa y recuperar parte del dinero que se les adeuda. 

Con esta situación, los trabajadores ven como la única vía que tenían abierta se va retrasando para recuperar la normalidad. Éstos también optaron por interponer una querella que el juzgado de instrucción número 19 de València inadmitía por estar tratándose en el juzgado de lo social número 17, donde se celebran estos juicios individuales. En este sentido, el juez consideró que los hechos plasmados no revisten caracteres delictivos al tratarse de una controversia de naturaleza laboral, como despidos y ceses de la relación laboral. 

Una decisión que recurrieron los abogados de los mismos al entender que se han dado engaños continuados por parte del consejo de administración de la empresa, que ha mantenido a la plantilla durante meses de alta, trabajando, sin cobrar y sin extinguir sus contratos. En todo caso, esta situación aletarga aún más la agonía de unos trabajadores que llevan prácticamente un año sin ver su sueldo.