CASTELLÓ. La justicia acecha al último comprador fallido de Marie Claire y amplía la responsabilidad civil en las sentencias condenatorias al propietario de Formen, Ángel Pío Sánchez, según han confirmado fuentes del TSJ. En principio las resoluciones solo contemplaban a la empresa que adquirió la textil de Vilafranca y dejaban fuera al titular de la misma, pero ahora, tal como defendía una de las representaciones legales de los trabajadores, Laborea, el juzgado de lo Social número 2 de Castelló ha decidido incluir al empresario. De esta forma, quiere explorar la posibilidad del embargo de patrimonio personal de Ángel Pío para hacer frente a las indemnizaciones previstas en las sentencias.

Según las mismas fuentes, el juzgado de lo Social número 2 ha dictado un auto por el que acuerda extender la responsabilidad civil en la ejecución de la sentencia de Formen. Cabe recordar que tres resoluciones de los juzgados de lo Social 2 y 3 de Castelló dieron la razón a los trabajadores y condenaron a Formen a pagar unos cinco millones a 70 empleados, que corresponden a las retribuciones y a las indemnizaciones por despidos improcedentes.

Los tribunales dan un paso  más e intentan localizar no solo bienes de Formen sino también del propietario para hacer frente a las cantidades económicas de los fallos judiciales. Primero buscó en las cuentas de Formen, pero esta  firma carece de recursos económicos, y ahora analizará también los del dueño de esta empresa, Ángel Pío Sánchez, basándose en la garantía personal que presentó en su momento para que el administrador concursal y el juzgado de lo Mercantil dieran luz verde a la operación de compra de Marie Claire, según fuentes de las defensas de los operarios.

Asimismo, según estas mismas fuentes, ahora queda pendiente resolver el futuro de los activos de Marie Claire, ya que, según señalan, la magistrada considera que estos forman parte de Formen aunque esta  compañía se marchara de forma unilateral de Marie Claire al haberse confirmado anteriormente la adquisición de la unidad productiva. Al respecto, queda por ver el futuro de estos bienes, que incluyen las naves industriales, sin descartarse -según fuentes conocedoras del proceso concursal- su subasta o venta. Las cuantías que se obtengan por los bienes que se localicen a Formen y Ángel Pío se destinarían primero a la masa laboral; luego, como acreedores, están el Instituto Valenciano de Finanzas, el Fondo de Garantía Salarial y los antiguos dueños de la fábrica -la familia Aznar-. Estos últimos no recibieron un euro del comprador por la cesión de los inmuebles, que fueron valorados en 1,4 millones de euros.

Por su parte, la maquinaria de Marie Claire ya se traspasó en verano a un fondo holandés, que recientemente sacó a subasta los equipos en 702 lotes. Una acción que recibió 5.833 pujas de un centenar de compradores internacionales procedentes de Europa, Asia y África.

Insolvencia provisional

Mientras tanto, el juzgado de lo Social ha decidido decretar la insolvencia provisional de Formen para que de esta forma el personal de Marie Claire pueda acudir al Fondo de Garantía Salarial q cobrar los salarios e indemnizaciones. El máximo que aportará el Fogasa será 120 días en cuanto a salarios impagados, más 20 días por año trabajado (con un tope de 365) respecto a las indemnizaciones por despidos.

Posteriormente, los fondos que se consigan a través de embargos o ventas de bienes de Marie Claire se destinarían al Fogasa y a las indemnizaciones que quedarían pendientes de los operarios.

De esta forma, el periplo judicial de Marie Claire aún no ha dicho su última palabra. Lo único seguro es que el final de la centenaria empresa de Marie Claire no tiene marcha atrás.