CASTELLÓ. (EFE).  La Unión de Consumidores de Castellón (UCE) ha asegurado, con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, que no se han solucionado los principales problemas que afectan a la provincia y de hecho, la duración media del viaje en tren entre València y Castelló es quince minutos superior al de hace 30 años. En un comunicado, la UCE ha denunciado que "apenas se han producido cambios especialmente significativos a favor de la utilización de medios de transporte más sostenibles y en especial, por lo que se refiere al establecimiento de un compromiso entre la administración/ayuntamientos y la sociedad civil al objeto de avanzar claramente en el desarrollo de políticas de movilidad sostenibles".

En este sentido han agregado que "si bien es cierto que en los últimos años se han llevado a cabo distintas iniciativas que fomentan la utilización de la bicicleta y el uso del transporte público, así como los desplazamientos a pie, todavía nos encontramos muy lejos de alcanzar un consenso que nos permita hablar de unas ciudades sostenibles desde el punto de vista de la movilidad".

Y como ejemplo de esta "dejadez e inacción" que denuncian por parte de la administración para resolver este problema, se encuentra en el tiempo medio de viaje de un tren de Cercanías entre València y Castelló, ya que mientras en 1989 era de 1 hora y 14 minutos, en la actualidad es de 1 hora y 25 minutos.

Es decir, "a pesar de una supuesta mejora de los equipamientos, de la evidente existencia de locomotoras más eficientes y de mayor potencia, o la necesaria modernización que el transcurso de 30 años debe producirse en cualquier tipo de servicio, el tren se ha situado a unos niveles que, probablemente, nos conducen a los años 60". Igualmente desde la UCE han destacado la necesidad de que se impulse la intermodalidad, para que "haya una conexión eficaz entre las redes de distintos tipos de transporte público: tren, autobús, carriles bici...".

Por otro lado, en esta era post-covid, para la asociación resulta "imprescindible" que "se garantice la seguridad de los viajeros, de manera que se asegure la posibilidad de que, en los vehículos de transporte cerrados, exista una adecuada ventilación y/o filtración del aire, poniendo a disposición de los usuarios geles y otros medios que faciliten la limpieza de las superficies".