CASTELLÓ. Mohawk Industries, el mayor productor mundial del azulejo y propietario de Marazzi (con planta en Castellón), cerró 2024 con una caída de un 1,7% de sus ventas, alcanzando una facturación de 4.206 millones de dólares (4.055 millones de euros). La industria de EEUU suavizó su descenso tras virar la tendencia en el último trimestre de año, en el que creció un 1,5%. Así, espera alcanzar "niveles históricos" en 2025, aunque apunta que el inicio de la recuperación es incierto por la incertidumbre existente en el panorama internacional
La multinacional, líder en la fabricación de materiales para la construcción, superó sus expectativas en 2024 en todos sus segmentos, con un repunte en el cuarto trimestre que en el caso del azulejo se ha materializado con un aumento en la cifra de negocio de un 1,5%, con 1.008 millones de dólares (967 millones de euros) en dicho periodo. "Nuestra industria ha estado en una recesión cíclica durante varios años y confíamos en que nuestros mercados volverán a niveles históricos, aunque el punto de inflexión sigue siendo impredecible", señala el presidente de Mohawk, Jeff Loberbaum.
La sección de cerámica mantuvo en 2024 una participación del 39% en los ingresos totales de Mohawk, que confirmó su condición de principal productor mundial de azulejos, con plantas en EEUU, México, Brasil, Italia, España o Rusia, entre otros países. En Europa, la oferta de productos de alta gama y las muestras dedicadas a la arquitectura han impulsado el crecimiento de las ventas comerciales, mientras la integración de Vitromex y Elizabeth en México y Brasil respectivamente le permitieron mejorar su oferta de productos y la estructura de ventas.
Incertidumbres en 2025
No obstante, el director ejecutivo de la compañía menciona la existencia de factores que impiden confirmar cuándo se afianzará la recuperación, entre otros, la debilidad de los mercados en el primer trimestre de 2025 y el incremento de la competencia que "ejerce una intensa presión sobre los precios". Respecto a esto último, la empresa vio reducido en 2024 su margen operativo por la bajada de precios, que se vieron compensados por el alza de las ganancias de productividad y la contención de costes.
Así, remarca que la reactivación "puede demorarse aún más a lo largo del año" a pesar, agrega la firma, de las necesidades en construcción en Estados Unidos y Europa, que se enfrentan a un problema de escasez de viviendas y tienen, además, una necesidad de rehabilitar su parque inmobiliario más antiguo "después de varios años de proyectos de remodelación pospuestos".
A la espera de la recuperación, la compañía trabaja en el desarrollo de nuevos productos diseñados con el objetivo de satisfacer la demanda, al tiempo que prosigue con el plan de reestructuración que impulsó en 2023, por el que prevé generar un ahorro de 285 millones de dólares al año hasta 2026.