CASTELLÓ. La iluminación y el sonido son los elementos que ayudan a crear la magia que percibe el espectador en grandes espectáculos y producciones audiovisuales. Una tarea que ha conseguido una mayor proyección y mejores resultados con la llegada al sector de las nuevas tecnologías, que han potenciado su capacidad para sorprender.
Este tipo de eventos son más comunes en espacios públicos urbanos de grandes ciudades, así como en teatros y auditorios. Pero el diseño del trabajo, en ocasiones, se realiza en zonas rurales, como es el caso de Soneja, uno de los epicentros del sector en las comarcas de Castellón y de la Comunitat Valenciana gracias al trabajo de la empresa Gamma Sound.
Evolución natural y vocacional
Su gerente e impulsor, Javier Campos, explica que todo empezó "con la orquesta Gamma", de la cual fue uno de los fundadores hace 25 años y donde dio rienda suelta a su vocación de músico en la percusión, más concretamente como batería del grupo. "Había temporadas de muchos bolos y otras en las que parábamos, entonces decidimos alquilar nuestros equipos", explica Campos. "A partir de aquí nos planteamos crear Gamma Sound ofreciendo servicios de sonido, iluminación y vídeo".