CASTELLÓ. Quizás la apertura de una tienda pueda tener un impacto mínimo para una ciudad. Pero en el mundo rural, abrir un negocio es mucho más que poner a la venta productos. Bien lo sabe el alcalde de la Villa de El Toro, José Arenes, un joven valenciano que decidió fijar su domicilio en esta pequeña localidad que heredó de sus antepasados y apostar por transformar una localidad que “hoy ya no es una desconocida”. 

El plan estratégico establecido por la máxima autoridad “va mucho más allá del embellecimiento. Se trata de demostrar que aquí se puede vivir. Y se vive muy bien”, ha declarado. La tienda del pueblo ha sido uno de sus objetivos. “Había que invertir en ella, dimensionarla a las necesidades de un pueblo que crece y quiere seguir creciendo. Reformarla para hacerla más cómoda y accesible. Para hacerla acogedora y adaptada a futuras necesidades”.

Hoy este objetivo es una realidad que ya disfrutan sus vecinos. “Muchos nos han felicitado por el proyecto” que ha tenido en cuenta los materiales de un entorno rural “que hemos respetado sin huir del diseño y la practicidad”. Inaugurada y ya operativa, “el proyecto se ha financiado con la primera fase del Plan Conviure, dependiente de la Generalitat Valenciana”. Gracias al “compromiso de los más grandes con quienes somos muy pequeños podemos emprender este tipo de empresas que, de otro modo, serían inviables para nuestro municipio”.

El Plan Conviure ha inyectado a la población 496.850 euros de los que una parte han ido destinados a rehabilitar, ampliar y acondicionar la tienda del pueblo. “Seguimos trabajando, porque aquí no hay descanso si lo que se pretende es frenar la despoblación. Y nosotros estamos empeñados en conseguirlo”, ha declarado el primer edil.