VILA-REAL. Los ediles Toni Marín y Santi Cortells han comparecido esta mañana en rueda de prensa para contestar a los concejales de Vox Vila-real que han acusado el equipo de gobierno y el regidor no adscrito de "vetar" una moción con motivo del Día Internacional de las Familias que presentaron al Pleno ordinario del mes de mayo. Ambos concejales han indicado que se pidió aplazar el debate de la moción a disponer de los informes del secretario municipal respecto si algunos de los puntos solicitados por Vox corresponden a competencias del Ayuntamiento y si alguna de las propuestas del partido podían suponer la vulneración de derechos fundamentales.
Marín, responsable de Servicios Sociales, ha destacado que "nosotros nos creemos a todas las familias, trabajamos por ellas y llevamos a cabo muchas acciones". En esta línea, el edil socialista ha explicado que, más allá de las ayudas de emergencias que otorga el consistorio, "destinamos más de 1,3 millones en convenios con entidades sociales o sociosanitarias y todas tienen detrás a familias y muchas, también a menores. Antes de que llegara este Gobierno al Ayuntamiento no había una aportación parecida".
"Que desde Vox quieran marcar qué modelo o qué ayudas tenemos que dar está fuera de lugar porque Vila-real es un espejo en el cual mirarse para otras muchas administraciones. Este Gobierno tiende puentes y no muros con las familias", ha sentenciado Marín que ha recordado que el consistorio mantiene, con recursos propios y a la espera de los fondos autonómicos, el Contrato Programa "sin despedir los trabajadores no como Alicante que echó 192 empleados de Servicios Sociales"; también se apuesta por el Centro de Desarrollo Infantil y Atención temprana que atiende cerca de 120 niños y niñas o el programa Mayor a Casa “porque detrás de una persona mayor hay una familia".
Por su parte, el edil de Compromís, Santi Cortells, solicitante del aplazamiento de la moción acorde al punto 92.1 del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las entidades locales (ROF), ha recordado que su petición salió adelante por mayoría y "entrará en el próximo Pleno". "Si el secretario municipal considera que la moción de Vox no vulnera ningún derecho y vuelve al Pleno, no saldrá adelante porque es una moción de la vergüenza. Una barbaridad así no será aprobada", ha valorado Cortells.
"Nos preocupan las personas vulnerables, aquellas que históricamente han sido marginadas, excluidas y que, intencionadamente, están olvidadas de la moción de Vox y cuando olvidas, excluyes; no las citan porque no quieren. Nuestro objetivo es, por lo tanto, proteger al más débil, proteger a estas personas de discursos como el de este partido", ha defendido Cortells que ha considerado que la propuesta de Vox es "de lo más reprobable porque sabemos qué quieren conseguir cuando mencionan aspectos como el arraigo social, el historial de empadronamiento o los años de residencia de ascendientes de primer grado".