VILA-REAL. El Ayuntamiento de Vila-real avanza en su plan de modernización del alumbrado público con la licitación de las obras de renovación de la primera fase. Concretamente, este paso inicial corresponde a la denominada Zona 3, que comprende los polígonos industriales y las áreas periféricas del municipio. El contrato cuenta con un presupuesto de alrededor de 1,97 millones de euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de nueve meses. El proyecto técnico prevé la sustitución de más de 3.300 luminarias existentes por nuevas unidades de tecnología LED con el objetivo de reducir el consumo eléctrico en torno a un 70 %. El plazo para presentar ofertas está abierto hasta el 25 de noviembre.
En este sentido, la sustitución de las farolas persigue tanto la mejora en la calidad lumínica como en la seguridad de estos entornos industriales. La actuación afectará a un total de 42 centros de mando, que abarcan los principales viales del extrarradio de la localidad, desde los polígonos de la carretera de Onda o la zona sur hasta los accesos de la carretera de Burriana, la zona del Hospital de la Plana, la ciudad deportiva Miralcamp o el cementerio municipal. El contrato obedece a la primera de las tres zonas delimitadas en el plan integral de alumbrado público; los siguientes trabajos se centrarán en la red urbana y el centro histórico.
Nueva iluminación inteligente y autorregulable
La intervención, financiada mediante una contribución de 1,98 millones de euros por parte del Ministerio para la Transición Ecológica, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) contempla la retirada de las lámparas de vapor de sodio y halogenuros metálicos y su reemplazo por luminarias de alto rendimiento con regulación inteligente. Estas luminarias podrán ser dirigidas digitalmente para monitorizar el consumo o detectar incidencias. Además, ajustarán automáticamente su intensidad según las condiciones climatológicas, el tráfico o el paso de peatones. Más allá de la propia iluminación, la actuación también abordará la renovación de postes, soportes y cableado, así como la adecuación de los cuadros eléctricos a la normativa.

- Las nuevas luminarias ajustarán su intensidad según condiciones climatológicas, el tráfico o los peatones.
Las nuevas luminarias —con protección IK10 frente a impactos y control de contaminación lumínica— estarán diseñadas para minimizar el resplandor nocturno y garantizar una iluminación más uniforme y segura, especialmente en los itinerarios ciclistas que conectan los polígonos con el casco urbano. Desde el área de Servicios Públicos, la vicealcaldesa, Maria Fajardo, destacó el pasado julio que esta fase es "uno de los pilares del proyecto global de eficiencia energética que transformará el alumbrado de todo el término municipal". Así, según los cálculos municipales, el ahorro anual en la factura eléctrica superará los 430.000 euros, con un retorno económico de 2,6 millones de euros en la próxima década.