VALÈNCIA. PPCV y Vox alcanzaron esta semana su innominado pacto para gobernar conjuntamente los próximos cuatro años. Un acuerdo logrado a una velocidad inusitada, sin ninguna ceremonia o escenografía, lo que contrasta con la solemnidad y simbología que desde la izquierda se trató de dar al Pacto del Botánico.
De esto y otras cosas que han pasado esta semana se pueden extraer conclusiones muy interesantes y valiosas respecto a lo que puede ocurrir a medio y largo plazo entre los socios de gobierno de la Comunitat Valenciana.
Pese al pacto exprés, los populares valencianos liderados por el próximo presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, no han priorizado evitar algunos conflictos emanados del documento con 50 medidas firmado conjuntamente: el más sangrante, la introducción del concepto de "violencia intrafamiliar" y no violencia de género. Algo que generó cierto revuelo nacional y por lo que saltó hasta el propio Alberto Núñez Feijóo.