VILA-REAL (EFE). El centrocampista del Villarreal Santi Cazorla ha vuelto a la selección española, tres años y medio después, tras superar un calvario de hasta ocho lesiones que amenazaban con dejarle fuera de los terrenos de juego para siempre, incluso no permitirle hacer vida normal, y lo ha celebrado con unas botas especiales que dedica a sus hijos India y Enzo.
El calzado con el que saltará al césped en los partidos contra Islas Feroe y Suecia, si así lo considera oportuno el asistente de Luis Enrique, Robert Moreno, que ejerce como entrenador principal debido a la ausencia del asturiano a causa de motivos familiares, refleja el espíritu de lucha que ha mantenido Cazorla durante los largos meses de operaciones, sufrimiento y frustración.
Numerosos pasos por el quirófano entre el tobillo derecho, la maldita infección y la reconstrucción del tendón de Aquiles con una plastia. Todo esto ha superado Santi y ahora quiere dedicárselo a sus hijos, en los que se ha apoyado durante el largo proceso de recuperación para no tirar la toalla.
En las botas, fabricadas por Puma, predomina el color verde e incluyen los nombres de India y Enzo además de dos lemas que representan la lucha del centrocampista. "Esta victoria también es vuestra" y "rendirse nunca fue una opción"; dos frases que Cazorla ha repetido durante los primeros días de su vuelta a la Ciudad del Fútbol de las Rozas (Madrid).
Cazorla, que suma 77 partidos como internacional tras su debut en 2008, se siente más futbolista que nunca. Con la ilusión renovada y las botas que ejemplifican su lucha intentará dedicar grandes momentos de fútbol a los suyos y a aquellos que creían que no iba a volver a disfrutar sobre los terrenos de juego.