El programa será de un año prorrogable, será obligado un curso de formación y la subsecretaría de la Conselleria será la encargada de resolver las peticiones y la continuidad en el proyecto
VALÈNCIA. Tras casi un año de trámites burocráticos, con su correspondientes tiranteces entre las diferentes consellerias implicadas (fundamentalmente la de Economía y la de Hacienda), el departamento de Rafa Climent ya tiene aprobado su programa de teletrabajo, el primero de la Generalitat. La Conselleria de Justicia, Interior y Función Pública ha dado finalmente el visto bueno a un plan que abre camino en la administración autonómica.
Desde este viernes, cerca de quinientos funcionarios tienen diez días hábiles para presentar su petición para trabajar fuera de su centro de trabajo y la Subsecretaría de la Conselleria decidirá sobre las mismas en un plazo máximo de tres meses y determinará los días, según las necesidades de cada unidad, para garantizar que habrá siempre un 20% de trabajadores de cada unidad administrativa que estén en la sede física y que un día a la semana coincidan todos.
La Subsecretaría será el encargado de decidir si se prorroga o no el programa (el silencio admninitrativo será afirmativo) o si se excluye del mismo a alguien que haya sido admitido. Entre las causas que especifica el decreto, no tener un telefono fijo o un móvil "con cobertura". Sólo podrán solicitar el ingreso en el programa los funcionarios que ocupan los puestos que se incluyen específicamente en un anexo al decreto que se publicó este jueves en el DOGV.
Una vez admitido en el programa, el personal que se una al programa deberá realizar un cursillo de manera obligatoria. No variará ni el horario de trabajo (generalmente de 9 a 14) ni el sueldo. No se deberá comunicar el lugar de trabajo ni se exige que sea el mismo cada día. Se deberá trabajar con un ordenador portatil corporativo (y se pide que a poder se se comparta entre dos) y se prohibe hacerlo desde el personal de cada funcionario. Además se exige un certificado digital de empleado público o uno personal. Por necesidades organizativas se podrá requerir a los funcionarios que acudan a la oficina con 24 horas de antelación.