Costas por fin responde y el Fadrell tiene vía libre para aprobar definitivamente el Plan General

CASTELLÓ. La dirección general de Costas por fin informa favorablemente al Plan de Ordenación Pormenorizada (POP), uno de los dos documentos del Plan General de Castelló (PG). Ahora, el Acord de Fadrell celebrará un pleno extraordinario la semana próxima para aprobar definitivamente el planeamiento urbanístico, cuya primera herramienta, el Plan Estructural, superó el filtro de la corporación hace ahora justo un año (noviembre de 2021). No obstante, entró en vigor algo más tarde al tardar unas semanas en publicarse en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).

Una vez recibida la documentación, los técnicos de Urbanismo trabajan contra reloj para rematar los últimos flecos con vistas a adecuar el PG. La votación del marco legal se producirá el viernes de la semana que viene.

Atraer inversiones

Para la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, se trata "de una gran noticia que Costas haya informado de manera favorable. Esto significa que nuestra ciudad dispondrá de un planeamiento urbanístico aprobado definitivamente en los próximos días después de casi dos mandatos de intenso trabajo. Un Plan General que recuperará la seguridad jurídicas tras una década con el anterior anulado por la justicia, que atraerá inversiones y contribuirá al relanzamiento socioeconómico de la ciudad".

El Plan de Ordenación Pormenorizada resulta esencial al entrar más al detalle respecto al crecimiento de las divisiones dentro del término municipal. En total, recoge 11 sectores en suelo urbanizable: seis de ámbito residencial, tres de uso terciario y dos con fines industriales. Su desarrollo permite completar vacíos en la trama urbana y cohesionar zonas de la ciudad y grupos periféricos. De ahí la importancia de que se apruebe cuanto antes.

Cronología del proceso

Castelló acumula más de 22 años de inseguridad jurídica desde que el Tribunal Supremo tumbara en 2008 el PGOU impulsado por el PP en el año 2000. A raíz de aquella anulación, el Ayuntamiento inició en 2013 la tramitación para la redacción de un nuevo Plan General. Sin embargo, quedó súbitamente paralizada tras la exposición pública del plan de paisaje, en diciembre de 2014. 

No fue hasta el cambio de gobierno municipal en 2015 cuando se retomó el procedimiento. Entre diciembre de 2016 y febrero de 2017 se sucedieron las reuniones vecinales (hasta 17) para informar sobre el nuevo planeamiento urbano.

A partir de ese momento, el Pacte del Grau, primero, y el Acord de Fadrell, después, quemaron etapas hasta llegar al punto actual, en la recta final de un interminable proceso. De hecho, la intervención de múltiples administraciones públicas ha acabado convirtiéndose en un freno pese a la voluntad política por culminar la diligencia en el menor tiempo posible.