CASTELLÓ. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios CSIF ha insistido en el "colapso" que, debido a la falta de profesionales médicos y sanitarios, están sufriendo este verano las urgencias de los Puntos de Atención Continuada (PAC) de los principales municipios costeros de la provincia.
Según han señalado, a modo de ejemplo, "el pasado sábado en el centro de salud de Peñíscola, los dos médicos que prestan allí sus servicios tuvieron que atender 180 urgencias y 3 avisos domiciliarios, mientras que el domingo día 11 hubo 155 atenciones y 7 domicilios más, lo que generó entre los pacientes esperas de más de dos horas para recibir atención".
Por lo que se refiere al centro de salud de Orpesa, las cifras del pasado fin de semana todavía fueron mayores. El sábado 10 de agosto, los dos enfermeros de esta instalación atendieron a un centenar de personas, mientras que los dos médicos y el refuerzo que presta allí sus servicios entre las 9.00 y las 21.00 horas vieron a 327 pacientes de urgencia. Por lo que se refiere al domingo día 11, hubo 93 atenciones de Enfermería y 255 de Medicina General. Cifras que también ocasionaron demoras superiores a la hora y media.
"Todas estas esperas, que se han agravado respecto a la semana anterior, ya que no se ha enviado ningún refuerzo, están provocando a su vez que, ante el colapso de estos centros de salud, muchos pacientes opten por acudir a los hospitales, lo que está saturando a su vez los servicios de Urgencias", han indicado desde CSIF.
En ese sentido, desde el sindicato han reclamado "medidas urgentes para reforzar los centros de salud y Puntos de Atención Continuada, para aliviar esta situación y agilizar el servicio, ya que los profesionales médicos y sanitarios se están viendo totalmente desbordados".
Esta situación también afecta a instalaciones de la capital de La Plana, como Trullols, Fernando el Católico y el Grau, donde el pasado fin de semana también se rozaron las 300 atenciones de carácter urgente, tanto el sábado como el domingo.