CASTELLÓ.(EP) El sindicato CSIF ha advertido de la "inseguridad" que sufren los vigilantes de los trayectos Fuente de San Luis (Valencia)-Castelló y Fuente de San Luis-Sagunt-Caudiel, ya que "se ven obligados a realizar su labor en solitario los fines de semana en frecuencias que alcanzan los 200 pasajeros".
La central sindical ha hecho hincapié en "la dificultad y riesgo de agresión que padecen estos vigilantes que desarrollan el servicio en solitario". Frente a esta situación, en un comunicado, ha reclamado que, "al igual que ocurre en la mayoría de trayectos, las patrullas sean de dos personas".
El sindicato ha señalado que las incidencias de las que se ocupan estos profesionales durante los trayectos son "muy diversas, desde arrollamientos hasta ayudas humanitarias, asistencias sanitarias de primera intervención, robos o saltos de alarma". A esta circunstancia se suman, en fines de semanas, actuaciones ante botellón en el tren, grafiteros o discusiones.
CSIF ha recalcado que "si la situación ya resulta complicada para una patrulla de dos vigilantes", en este caso, al ser solamente uno, se agrava porque "está continuamente expuesto a que le agredan tanto física como verbalmente, a que en momentos dados no pueda ofrecer ayuda porque no cuente con la capacidad operativa suficiente o a que tenga que estar más pendiente de su propia seguridad e integridad que de la de los viajeros o personal trabajador de Renfe".
En este punto, la organización sindical ha recordado "las recientes agresiones, con apuñalamiento incluido, sufridas por vigilantes de tren en Cataluña".
Por todo ello, ha reclamado a la empresa concesionaria de este servicio de vigilancia en Renfe que destine patrullas con dos profesionales para cubrir, los fines de semana, estas líneas entre Valencia y Castellón y Valencia y Caudiel.
La central sindical ha insistido en "el peligro y la indefensión que conlleva para los trabajadores de seguridad esta situación, que tampoco garantiza a los pasajeros la prestación adecuada".
