MADRID/ VALÈNCIA (EP). El Ministerio de Cultura ha activado este jueves el Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en Patrimonio Cultural tras los efectos de la DANA en numerosos puntos de la geografía española.

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, según ha precisado el departamento a Europa Press, se ha puesto en contacto con los consejeros de Cultura de las comunidades autónomas afectadas para interesarse por la situación y ofrecer apoyo para hacer frente a las necesidades que pudieran surgir cuando se conozca el alcance de la DANA en lo que al ámbito cultural respecta.

El Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en Patrimonio Cultural, de acuerdo con la información de la página web de Cultura, al igual que el resto de planes nacionales, es un instrumento "pluridisciplinar" de gestión integral, con participación de las diversas administraciones para el fomento del conocimiento, la programación de acciones preventivas, la formación de técnicos y la difusión del patrimonio cultural.

Cultura señala que el patrimonio cultural "no está libre del riesgo de sufrir daños como consecuencia de catástrofes", como la que ha producido la DANA.

Por ejemplo, el Museo Ruso de Málaga permanecerá cerrado hasta el próximo martes, 5 de noviembre, para realizar labores de mantenimiento en el edificio, debido a la bolsa de agua que se ha creado en la cubierta del edificio por las fuertes lluvias que tuvieron lugar el pasado martes 29 de octubre.

También el martes, las lluvias en Sevilla obligaron a suspender el espectáculo Naturaleza Encendida por los daños que sufrieron los jardines y caminos tras cuatro días de lluvia.

Pérdida de imágenes y archivos en parroquias

El Arzobispado de Valencia informa que todas las parroquias de la zona han quedado "anegadas" y muchos de sus archivos "destruidos", además de sufrir la desaparición de gran parte de las imágenes. De momento no se valora ahora el alcance de los daños, ya que los párrocos están "centrados en la labor fundamental de acompañamiento a las víctimas de esta tragedia".

Ante esta situación, el arzobispo Enrique Benavent ha convocado a una reunión extraordinaria al consejo episcopal, órgano de gobierno de la Archidiócesis, en la que están tomando parte todos los vicarios episcopales, para conocer las necesidades urgentes de las zonas afectadas por la DANA y ayudar desde todo el territorio que engloba.

Paralelamente, el Arzobispado agradece las múltiples muestras de ofrecimiento de aportación de medios económicos y materiales, pero pide que lleguen únicamente a través de Cáritas diocesana.