De horno histórico protegido a restaurante, la fusión que se 'cuece' en el centro de Castelló

CASTELLÓ. Levar, tostar, hornear, flambear... La cocina está de moda y la apuesta por nuevos espacios gastronómicos en Castelló es una tendencia, pese a los estragos de la pandemia y pese a la sacrificada vida detrás de una barra o entre fogones.

Pero cada vez hay más apuestas diferentes en el centro histórico de Castelló. Y en pleno corazón de la ciudad están ahora mismo latiendo las primeras pulsaciones de un futuro restaurante. 

Se trata del mítico horno de la calle Antoni Maura, 31 conocido como 'Forn del Canyaret'  o de Paco Miralles y que, anteriormente, según las crónicas de la ciudad, se llamó Forn de Reus -como así se recoge en el libro 'Antigüedades de Castelló' de Vicente Traver- y que al menos consta desde el siglo XIV. De los siete hornos medievales que había en Castelló es el único que se mantiene en pie y dispone de una parte de cúpula central de estilo gótico de ladrillo macizo y un doble arco ojival, que el catálogo también data del siglo XIV, así como la zona de amasado del pan.

Sin embargo, hace décadas que esta panadería cerró al público, dejando detrás de sus puertas un recuerdo de harina y azúcar. Sin embargo, es cuestión de tiempo que dentro de sus tabiques se recupere el gusto por los alimentos ya que una empresa ha solicitado al Ayuntamiento una licencia de apertura para instalar un espacio gastronómico.

Con todas las garantías de protección

La mercantil Vicking Mama SL., constituida en 2020, es la que capitanea este proyecto en una zona en la que cada vez hay más opciones de ocio y servicios de comida. Asimismo, al tratarse de un edificio con partes protegidas (el propio horno y los arcos que existen dentro) hace que el inmueble forme parte del catálogo de edificios protegidos de Castelló.

No obstante, tal y como ha explicado el edil de Urbanismo, José Luis López, al tratarse de elementos protegidos "con el proyecto entregado a la comisión de patrimonio, se garantiza que estos espacios quedarán preservados e incluso pueden integrarse" para que los comensales los puedan visitar. De momento, con todos los permisos ya en regla y las garantías de protección a los elementos de interés, ya ha comenzado la reforma para el nuevo establecimiento culinario esté listo cuanto antes.