CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló sale al rescate del aparcamiento de la plaza Santa Clara para evitar su cierre a consecuencia del Contencioso-Administrativo interpuesto por la concesionaria, Promociones Castellonenses SA, en proceso de liquidación desde 2016. La mercantil, adjudicataria de la gestión hasta 2023, reclama una indemnización en concepto de lo que denomina "desequilibrio económico". En concreto, solicita una revisión de los precios estipulados en el contrato, a la que se opone el Acord de Fadrell por el perjuicio que supondría para los usuarios.
El litigio abierto por la empresa pone en peligro la prestación del servicio, una amenaza todavía más manifiesta a raíz del proceso concursal. Ante esta incertidumbre, el portavoz del Gobierno municipal, Rafa Simó, asegura que "entendemos que, por la idiosincrasia del parking y su compleja tramitación, tenemos que hacer todos los esfuerzos para que siga abierto".
Promociones Castellonenses SA oficializó su situación de quiebra en 2016. Con la concesión bloqueada por una entidad bancaria, el Ayuntamiento de Castelló trató de romper la vinculación contractual para licitar de nuevo la gestión. Con ello, hubiera evitado el pago del cerca de millón de euros que se le adeudaba a la mercantil, 965.000 euros por la inversión en el subterráneo y 16.000 correspondiente a reparaciones varias.
El tira y afloja entre las dos partes adquirió una nueva dimensión con la denuncia de la empresa en el Juzgado de lo Contecioso-Administrativo número 2 de la capital de la Plana contra el silencio administrativo producido en su solicitud de "reequilibrio concesional".
Según explica Simó, "ese silencio administrativo se produjo al estar negociando con la empresa, que además está en concurso, siendo muy complicado ponerse en contacto con sus representantes".
"Piden variar el acuerdo, argumentando pérdidas por la crisis económica, las obras que hubo en Santa Clara y el plan de Movilidad. Nosotros consideramos que no tiene razón en su reclamación", añade el portavoz del tripartito, quien insiste en que "la voluntad de este Ayuntamiento es que el parking no deje de prestar servicio".
El aparcamiento, construido en los años 80, cuenta en la actualidad con más de 400 plazas públicas, distribuidas en tres plantas. Su enclave resulta de especial interés para los castellonenses y turistas que visitan diariamente la ciudad al encontrarse en pleno centro.
