CASTELLÓN. El hundimiento sufrido en la segunda parte del partido ante el Atlético Levante no es un fenómeno nuevo esta temporada en el Castellón. El equipo albinegro ha evidenciado esa costumbre durante toda la temporada y con los tres entrenadores que lo han dirigido.
Esta reiteración de derrumbes en los segundos 45 minutos ha hecho perder a los albinegros nada menos que once puntos esta temporada en ocho partidos que tenía empatados o ganados al descanso. En cambio, tan solo ha mejorado los resultados de los intermedios en dos encuentros, llevándose tres puntos más.
Así pues, hechas las sumas y restas, el Castellón estaría con 34 puntos, ocho más de los que tiene, en caso de haber mantenido sus resultados de los 45 minutos iniciales tras la reanudación del encuentro. Esta puntuación le habría valido para estar a mitad de tabla y ver el futuro con menos angustia.
Se da la circunstancia de que las mayores caídas del equipo se han producido en casa. En cinco ocasiones se han llevado ese mal trago los aficionados que han acudido al recinto albinegro (Atlético Baleares, Lleida, Sabadell, Teruel y Atlético Levante), mientras que en las visitas, esa situación se ha producido en los campos del Ontinyent, Espanyol B y Badalona.
Los puntos perdidos a última hora también han sido costosos para el conjunto albinegro, que ha encajado goles decisivos en los cinco últimos minutos ante Ontinyent, Espanyol B, Lleida y Atlético Levante, dejando escapar siete puntos.