CASTELLÓ. Castalia volvió este domingo a vibrar con el Castellón casi tres meses después del último partido de los albinegros en casa y lo hizo además con el regreso al fútbol profesional. Los aficionados orelluts disfrutaron de las mejoras del estadio en un número muy alto -13.709 espectadores en pleno mes de agosto- y con el espíritu de entrega permanente a la causa. Solo faltó poner la guinda a la noche con una victoria frente al Oviedo, que finalmente no llegó a pesar de la gran cantidad de ocasiones que crearon los albinegros.
Hacía 14 años que la afición del Castellón no vivía, en toda su extensión, un partido de Segunda División en su templo -la última temporada de los albinegros en el fútbol profesional, la 2020/21, se jugó a puerta cerrada o con acceso muy limitado debido al covid-19-. Pese al empate a cero, la gente vibró con el equipo antes, durante y después del encuentro, con un recibimiento apoteósico al que le siguió el disfrute por el espectáculo que ofreció el equipo, pese a su falta de gol. Al final, la gente ovacionó a unos jugadores que permanecieron durante varios minutos en el campo para agradecer el respaldo de sus incondicionales.
La gran prueba para el ahora denominado SkyFi Castalia era comprobar cómo estaba el terreno de juego tras el cambio de drenaje realizado en las últimas semanas. Los primeros tepes del nuevo césped se colocaron el martes, con muy poco tiempo por delante para que estuviera en las mejores condiciones de cara al partido frente a los asturianos, que se disputaba cinco días después. Pero el verde elemento respondió bien a la exigencia de la competición, pasando la prueba con nota.
Otra de las novedades fue el estreno de la iluminación, que sustituyó a la que se había instalado cinco años atrás y que ofrece una potencia mucho mayor, dentro de los estándares de exigencia de LaLiga. Además, la afición pudo disfrutar del nuevo videomarcador, instalado en la zona de gol norte.
No han sido las únicas reformas que se han hecho en el estadio municipal. Y es que también ha habido obras menores, pero igualmente importantes para cumplir con los requisitos del órgano que preside Javier Tebas, como la instalación del grupo electrógeno para las retransmisiones de televisión, las adecuaciones de los vestuarios de los equipos y del colectivo arbitral y la ampliación de la sala antidoping. Todas estas novedades se estrenaron el domingo sin incidentes.
Pero sí hubo inconvenientes. Los principales problemas se dieron en los accesos a la grada. Cientos de espectadores tuvieron dificultades para entrar al no poder validar las entradas y los carnets de abonado que tenían que presentar junto al DNI, lo que hizo que, a muy poco tiempo de empezar el partido, se formaran grandes filas de aficionados. Para evitar mayores problemas, el club optó finalmente por permitir el acceso exigiendo únicamente la entrada para acelerar el proceso y evitar colas con el partido ya en juego.
Quejas sobre los baños o el servicio de bar e incluso problemas para sentarse en sus asientos fueron otros de los inconvenientes de este primer partido de liga en casa.
El presidente del Castellón, Haralabos Voulgaris, ha reconocido estos problemas en su cuenta de X y ha prometido correcciones. "Necesitamos mejorar el proceso de entrada, los problemas de venta de entradas y la experiencia de los aficionados en el SkyFi Castalia", ha manifestado, además de pedir recomendaciones a otros usuarios castellonenses de la red social.
