CASTELLÓN. La primera Jornada de Residentes organizado por el Colegio Oficial de Médicos de Castellón ha concluido este jueves con dos objetivos cumplidos: ofrecer la formación práctica en materias que los MIR demandan y, en el aspecto institucional, marca un punto de inflexión en la relación entre médicos jóvenes y la institución colegial. El anhelado “acercamiento” del ente colegial -que se ha marcado como reto la nueva junta directiva- ha comenzado a ser una realidad a tenor de los testimonios, la implicación y la positiva participación.
“Los médicos jóvenes han sido los protagonistas y han podido comprobar que el colegio de médicos se va a volcar con sus actividades y que esta casa es la de todos, por supuesto de los jóvenes que hasta ahora veían esta entidad como algo distante”. Así lo ha expresado el presidente de la organización, José María Breva, durante el acto de clausura de la primera jornada de talleres formativos celebrada en la provincia con el apoyo del colegio.
Acompañado por el responsable de Formación y Docencia, Vicente Pascual y por la doctora Raquel Albiol, organizadora de esta jornada, el presidente ha puesto el cierre a unas sesiones formativas que se han desarrollado durante todo el día y en las que hilos de sutura, respiradores y maniquíes han complementado la base teórica de charlas, debates y encuestas interactivas, según informan fuentes de la propia entidad colegial a través de un comunicado.
Seis talleres disponibles en diferentes horarios y una concurrida ponencia sobre salidas laborales al finalizar la residencia, han completado un programa traducido en el compromiso tácito de residentes y colegio de convertir estas jornadas en una cita marcada en rojo en el calendario de la Profesión Médica de la provincia de Castellón.
