CASTELLÓ. El término municipal de Tírig albergará una explotación porcina destinada al engorde de hasta 2.500 cabezas de cebo. La instalación, formada por dos naves donde se realizarán las tareas de cebado del ganado, se ubicará en las proximidades de la carretera CV-130.
Según el proyecto empresarial, cuya declaración de impacto ambiental acaba de ser aprobada por la Generalitat, los animales los proporcionará una granja suministradora que posteriormente, tras el engorde, los trasladará al matadero. Se realizarán dos ciclos anuales de cebado de 120 días. De esta manera, los animales entrarán con unos 15 kilos de peso hasta alcanzar los 95.
Este no es el único proyecto ganadero impulsado en la provincia en lo que llevamos de año. En l’Alcora, la empresa Avícola Sichar construirá una explotación orientada a la cría y reproducción intensiva de aves de corral con un máximo de 29.017 cabezas y que estará ubicada en la partida Morral, muy cerca de la urbanización El Regatell y del embalse de María Cristina. El proyecto empresarial cuenta también con la Declaración de Impacto Ambiental por parte de la Generalitat.
La explotación ganadera posibilitará la obtención de huevos fértiles que tras la incubación darán lugar a las aves reproductoras de los pollos de engorde, aunque la selección de los huevos viables y su posterior incubado y eclosión se harán en otra explotación. Las pollitas se introducirán en la explotación avícola de l’Alcora a partir de la semana 20 de edad, aunque su madurez física se dará a las 30 semanas y el ciclo reproductivo en la explotación ganadera durará diez meses.
La provincia de Castellón se ve especialmente afectada por el modelo industrializado y más de la mitad del ganado porcino de toda la Comunitat Valenciana se sitúa en el territorio castellonense.
