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las actuaciones permitirán CONSTRUIR EL NUEVO AULARIO

El Consell pone fin a años de espera y activa el proceso para derribar el IES Jaime I de Burriana

1/07/2019 - 

CASTELLÓ. La Conselleria de Educación ha liquidado años de incertidumbre y reivindicaciones y ha licitado por 704.998 euros el contrato de redacción del proyecto de derribo del IES Jaume I de Burriana y la posterior construcción del nuevo aulario en el mismo solar. La propia alcaldesa, María José Safont, reclamó el pasado mes de febrero a la Generalitat, a través de Castellón Plaza, que agilizara la tramitación.

La urgencia municipal está justificada. El instituto público ubicado en el barrio de La Bosca suma más de medio siglo de antigüedad y adolece de un maltrecho estado arquitectónico. La apuesta por los nuevos ciclos formativos de Carpintería y Artista Fallero obliga a una profunda remodelación del aulario, de ahí que finalmente la conselleria haya apostado por derribar el edificio principal, el gimnasio y la vivienda del conserje para alzar un complejo educativo de nuevo cuño.

El Consell prevé gastar 250.959 euros en los trabajos de demolición. En total, se estima que las obras del nuevo instituto costarán 13.513.523 euros y se ejecutarán en 20 meses. El proyecto constructivo, que estará redactado a finales de año, ajustará al milímetro esta previsión inicial.

Mientras se ejecuten los trabajos en la parcela de 19.327 metros cuadrados, los alumnos serán reubicados en barracones en el solar del antiguo IES Llombai. La previsión autonómica es inaugurar el nuevo instituto a finales del año 2021.

Regeneración del barrio La Bosca

Por otro lado, el consistorio pretende impulsar medidas para revitalizar el barrio de La Bosca, donde se emplaza el IES Jaume I. Para ello, ha encargado la redacción de un estudio diagnóstico sobre el perfil sociourbanístico del barrio que estará listo en el último trimestre del año.

El documento planteará medidas concretas para reducir las bolsas de marginalidad, potenciar la resolución de conflictos sociales, mejorar la estética urbana de La Bosca y favorecer la inclusión social de los vecinos en situación de pobreza. El consistorio pretende activar todas las medidas que sugiera el estudio en un horizonte de tres años.

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