CASTELLÓ (EP). La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha visitado las obras de acondicionamiento de la N-232 en el tramo Masía de la Torreta-Morella Sur, donde ha señalado que el Gobierno de España apuesta por conectar Els Ports y El Maestrat con el resto del territorio.
Estas actuaciones, junto a las ya finalizadas de acondicionamiento del Barranco de la Bota-Masía de la Torreta (Puerto de Querol), han supuesto una inversión total cercana a los 76,5 millones de euros por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible.
En este acto, la delegada ha puesto de manifiesto "la relevancia social de estas obras", que mejoran el último tramo que faltaba por acondicionar de la N-232 en la provincia de Castellón, con una inversión para esta actuación de cerca de 21 millones de euros.
El Gobierno de España (ha dicho Bernabé) apuesta por conectar, unir y vertebrar las comarcas de Els Ports y El Maestrat con el resto del territorio, al mejorar "notablemente" las condiciones de esta carretera. Gracias a las obras realizadas se transitará por la N-232 "con más rapidez, más comodidad y más seguridad al dotarla de mejor capacidad y más funcionalidad". Bernabé ha añadido que la modernización y la transformación del país "han de venir de la mano de la cohesión social y territorial, priorizando el desarrollo de las zonas de interior".
La delegada ha remarcado que el Gobierno de España destina a la provincia de Castellón más de 208 millones de euros para infraestructuras viarias. Se trata de "una cifra histórica" que refleja "el compromiso del Gobierno con la provincia", ha dicho.
La carretera N-232 actual, por la que circulan cerca de 3.000 vehículos al día, con un 16 por ciento de vehículos pesados, en el tramo que abarca desde la Masía de La Torreta hasta Morella Sur, se caracteriza por tener un trazado sinuoso tanto en planta como en alzado, debido a la orografía ondulada del terreno, modelada por la presencia de cauces naturales como el río Bergantes.
Además, salvo en su zona final, tiene una sección transversal estrecha que no supera los 6 metros de anchura. Esta situación provoca limitaciones de visibilidad y funcionalidad, juntamente con la presencia de numerosos accesos en el tramo. Dados los condicionantes detectados, se ha diseñado un nuevo trazado para una velocidad de proyecto de 80 kilómetros/hora, con una sección de calzada convencional que consta de dos carriles de 3,50 metros y arcenes de 1,50 metros.
Se busca, al mismo tiempo, la reordenación necesaria de los accesos y proporcionar la accesibilidad requerida, aprovechando al máximo la traza existente para minimizar el impacto en el entorno. Además, se han proyectado un total de 6,845 kilómetros de caminos de servicio adicionales para permitir el acceso a las propiedades colindantes.
También se han contemplado accesos al tronco mediante carriles de cambio de velocidad en su zona inicial y central, y una glorieta partida en su extremo final. Esto, junto con los tres pasos inferiores proyectados, facilitará la accesibilidad y los movimientos entre los caminos de servicio ubicados a ambos lados de la carretera. También se ha proyectado la construcción de un nuevo puente sobre el río Bergantes, con una anchura libre de 22,60 metros entre estribos.
El puente existente y el tramo de carretera adyacente serán utilizados para acceder a las fincas colindantes. Además, el proyecto incluye las medidas necesarias de restauración e integración ambiental, incluyendo la instalación de pantallas acústicas.