CASTELLÓN (EP). El senador de Compromís por Castelló, Jordi Navarrete, ha lamentado que el Gobierno "admita en una respuesta su total desconocimiento del problema de expolios que sufren los olivos milenarios y centenarios en distintas autonomías", como en las zonas limítrofes del norte valenciano y sur catalán, la zona con la mayor concentración mundial de esta clase de ejemplares monumentales.
Según ha indicado la coalición en un comunicado, la respuesta dada por el Gobierno "es que es responsabilidad de las autonomías la protección y catalogación de este patrimonio arbóreo", pero "omite que además de los agentes medioambientales tienen el papel de control de movimientos por carretera y de trasiego de elementos vegetales los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (Tráfico y Seprona)".
"Los movimientos de estos ejemplares suelen ser llamativos en camiones articulados donde los ejemplares han sido debidamente podados para su traslado y replantado, por lo que nos extraña que no conste ninguna clase de información sobre la catalogación de estos árboles singulares ni de su eventual salida de su entorno geográfico, especialmente en un contexto de fuerte alarma en el sector por la presencia en varias autonomías de la xylella fastidiosa", lamenta el representante castellonense.
Recientemente, organizaciones agrarias como la Unió de Llauradors han denunciado el expolio de olivos centenarios en Sant Jordi y "son muy conocidos numerosos casos de compra venta y robo de esta clase de ejemplares y que hoy se hallan replantados en países y jardines de países de medio mundo, alguno de ellos en propiedades de personalidades bien conocidas del Estado".
Pero según el Gobierno "no se tiene constancia de se hayan llevado a cabo actuaciones relacionadas con el expolio de este tipo de árboles y, por tanto de la existencia de problemática al respecto, por parte de las Unidades del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil".
Compromís ha denunciado recientemente que quienes comercian "siguen haciéndolo bordeando la ley, ya sea en la vecina autonomía de Cataluña, donde no es de aplicación la mencionada ley, podando la copa de los árboles antes de su transporte o utilizando ejemplares de menor antigüedad, algo complejo de evaluar para los agentes que puedan participar en los supuestos controles".
Por ello, reclamaban al Gobierno medidas ante esta problemática y conocer cuál es el procedimiento habitual de control de estos árboles monumentales durante los trabajos de extracción y arrancado o durante su transporte en carretera y el número de intervenciones realizadas en los últimos 10 años por autonomías.
Finalmente se proponía regular a nivel estatal esta materia o extender la aplicación de la pionera ley valenciana, para evitar problemas de coordinación entre autonomías o que se produzcan expolios como los recientemente denunciados por colectivos de les Terres de l'Ebre y organizaciones agrarias.