El Hospital Provincial cierra el año económico con un saldo deudor de casi 10,5 millones de euros

CASTELLÓ. El Consorcio Provincial Hospitalario de Castellón cerró el pasado ejercicio económico con un saldo deudor de casi 10,5 millones de euros, según se subraya en la auditoría expuesta en las cuentas generales de la Generalitat publicadas este miércoles. En este documento se destaca, además, los casi 8 millones previstos para este año y el próximo, con el fin de afrontar diferentes obras en el centro, y cuya principal partida se la lleva la redacción y ejecución del proyecto para la segunda fase del Edificio Oncológico.

En cuanto al apartado de ingresos recibidos a lo largo del último año económico, el Hospital Provincial, cuyas instalaciones pertenecen a la Diputación pero cuya gestión sanitaria corresponde a la Generalitat Valenciana, recibió de la institución provincial un total de 24,3 millones de euros en concepto de transferencia corriente procedente del Ministerio de Administraciones Públicas.

Por otro lado, la aportación de la Generalitat para la asistencia sanitaria en este mismo periodo fue de casi 69 millones de euros.

A raíz de estas aportaciones, según se señala en el balance de resultados, el cierre del saldo deudor de la entidad alcanza los 10,5 millones de euros.

Gastos en obras y nuevas instalaciones

Por otro lado, en el capítulo de gastos previstos para este año y el 2021, destaca los proyectos de obras para la reforma de Urgencias, por un importe de 600.000 en cada anualidad; mientras que la redacción del proyecto y la ejecución de obra de la segunda fase del futuro Edificio Oncológico dispone de una partida para este año de 2,2 millones de euros y de otros 2,7 millones para el siguiente.

Otras actuaciones corresponden a la reubicación de Anatomía Patológica, para el que está previsto un gasto de 400.000 euros tanto este año como en 2021; o las mejoras de accesibilidad, que supondrán un coste de 200.000 euros a lo largo del presente ejercicio. Otras partidas corresponden las actuaciones dirigidas a adaptar y adecuar el edificio a la nueva normativa, para lo que está previsto un gasto de medio millón de euros a lo largo de este año y de 200.000 para el ejercicio del 2021.