CASTELLÓN (EFE). El pleno del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado este jueves, con quince votos a favor de los grupos PSPV-PSOE, Compromís y Castelló en Moviment y once en contra del PP y Ciudadanos, el cambio de la denominación de la ciudad exclusivamente como Castelló en lugar del topónimo bilingüe.
Tras un tenso debate en el que la alcaldesa, Amparo Marco, ha tenido que llamar al orden a varios concejales y pedir "respeto" en sus intervenciones con el resto de concejales, el pleno ha concluido así el proceso iniciado en junio para aprobar la propuesta de denominar a la capital castellonense solo por su topónimo en valenciano.
Además, durante la sesión se ha dado cuenta de la resolución de las alegaciones presentadas durante el proceso del cambio de nombre.
El portavoz de Castelló en Moviment, Xavi del Señor, ha afirmado que la aprobación es un paso "hacia la normalidad" en un día, a su juicio, "histórico": "Nos enriquecemos como ciudad porque el nombre es Castelló", ha dicho.
El portavoz de Ciudadanos, Vicente Vidal, ha defendido la doble denominación y ha afirmado: "Ya que les gusta tanto la memoria histórica, hagamos uso de ella" porque "lo único que quieren es imponer su ideario y generar un clima de crispación donde no la había".
Por parte del PP, Carlos Feliu ha afirmado que por ley "no es obligatorio tener un solo topónimo" y ha sostenido que las alegaciones se han rechazado "por un certificado falso que hace dudar de todo el procedimiento".
Ignaci Garcia, portavoz de Compromís, ha asegurado que la oposición "no ha explicado por qué lo que vale para la Comunitat Valenciana no vale para Castellón" y les ha acusado de que "calumniaron y despreciaron al mundo académico, universitario y a los cronistas de la ciudad" que han sufrido "menosprecios y amenazas".
En ese punto Vicente Vidal y la portavoz del PP Begoña Carrasco se han levantado y han hecho uso de la palabra sin tenerlo, por lo que la alcaldesa les ha llamado al orden y ha pedido, especialmente a Vidal, que se tranquilizara, aunque éste ha acabado abandonando el salón de plenos.
Amparo Marco ha recordado que previamente al pleno los concejales de la corporación se han reunido para acordar mantener el respeto en la sesión, algo que ha tenido que hacer cumplir en reiteradas ocasiones, como cuando Vidal ha leído una descripción de "fascismo" y ha dicho que eso es lo que eran en Compromís.
Marco ha preguntado a Vidal "si se ha escuchado lo que ha dicho", y ha vuelto a pedir respeto en las intervenciones.
Tras el trámite de alegaciones, éstas se trasladarán al Consell y será este quien, después de consultar a la Acadèmia Valenciana de la Llengua, tomará la decisión final que conllevará a la normalización del topónimo.