CASTELLÓ. El Teatre Principal será estos días el escenario de un combate de palabras entre dramaturgos de la Comunitat valenciana en el que habrá dos representantes castellonenses: Sergi Tellols (Vila-real) y Arturo Sánchez Velasco (Torreblanca). Ambos, junto a otros seis representantes de las provincias de Alicante y Valencia, pelearán -y nunca mejor dicho- por convertirse en el mejor escritor en la octava edición del Torneig de Dramatúrgia que organiza un año más el Institut Valencià de Cultura.
“En un momento como este es necesario que haya iniciativas de estas características porque permite que se pueda ver en el escenario el trabajo de dramaturgos y profesionales de toda la Comunitat. Ahora que parece que todo vaya en dirección contraria y que se corre el peligro de que pueda haber recortes, es básico que desde el IVC saquen adelante este tipo de propuestas”, explica el de Torreblanca.
Tellols, por su parte, apunta que es una manera de darles apoyo: “Hay mucha gente que está escribiendo textos y no tiene ningún tipo de visibilidad. Hay veces que estás tentado de tirar la toalla pero propuestas como el torneo anima”. Y va más allá: “Con este tipo de iniciativas se generan redes y contactos, porque te permiten conocer a otra gente que está escribiendo textos igual que tu y que se encuentra en situaciones similares a la tuya. Además, en este caso vamos a tener público que vendrá al teatro a escuchar tu trabajo y vamos a tener actores que pondrán en escena ese texto, y eso aumenta esa red de la que hablo, porque estás en relación directa con escritores, actores y público involucrado y activo. Así es como se generan nuevas oportunidades y nuevas sinergias, por lo que solo se puede dar la bienvenida a este torneo”.
Un combate a ciegas que decide el público
Para la ocasión, se instalará un ring de boxeo en el Principal y dos actores profesionales subirán al cuadrilátero a leer el texto de dos participantes, puesto que se enfrentan por parejas, sin desvelar el nombre de los autores. Y ahí es cuando se cede el protagonismo al público, que será quien tenga la última palabra para decidir quienes de los 8 dramaturgos pasa a la semifinal, donde se luchará por un puesto en la final que se resolverá en el Teatre Rialto de València.
“Cuesta mucho poner en escena obras. Hace 30 años necesitábamos muy poco, solo ganas y amigos que ponían todas sus energías para sacar adelante proyectos, pero llega una edad en la que esto no es suficiente y necesitas de ciertas condiciones profesionales que aquí en la Comunitat no se dan, por desgracia”, apunta el torreblanquino, quien insiste en aplaudir la celebración de este torneo.
El trabajo de los autores teatrales es complejo, y Tellols apunta la necesidad de diferenciar el aspecto creativo y el empresarial. “Son dos cosas totalmente distintas. Los escritores nos centramos en mejorar el aspecto de la escritura, que es lo que nos gusta, pero desconocemos cómo movernos dentro de la pequeña industria, incluso nos cuesta ver las oportunidades que puedan aparecer. Es algo que se va aprendiendo, y tener la oportunidad de participar en iniciativas como la del ICV te va aproximando un poco más a este mundo y ayuda a dar pasos”.
Dudas y secretismo en los textos
Las condiciones para presentar el texto son claras. La extensión de su lectura no ha de superar los 30 minutos y tiene que estar escrito en castellano o valenciano (o mixto, en las dos lenguas). El enfrentamiento se podrá presenciar por streaming el martes 25 de junio a partir de las 19.00 horas. Sánchez Velasco ya conocía la convocatoria y el formato. “Ellos hacen primero una preselección y contactan contigo. Si tienes un texto que se adapte a las bases o tienes disponibilidad y tiempo para prepararlo, entras. Me apetecía mucho participar en el torneo y me hizo mucha ilusión cuando me lo propusieron”.
El vila-realense también conocía el formato, aunque él no lo tuvo tan claro a la hora de decir que sí: “Dudé mucho porque yo vengo del mundo audiovisual y no del teatro. Y ahí aparece el síndrome del impostor. Me asusté un poco y no sabía si sería capaz, pero como vi el componente lúdico que tenía el proyecto pensé que quizá era la excusa perfecta para ponerme a escribir un texto de teatro, que hacía mucho tiempo que no hacía, y entrar en el juego. Y ahora que ya he entregado el texto puedo decir que tengo ganas de que llegue la fecha. Del torneo tenía alguna referencia porque conozco a algún compañero que ha participado en ediciones anteriores, pero no conocía el detalle del torneo”.
Con respecto al texto que ambos proponen poco pueden contar. El público que acuda al Teatre Principal no debe tener ninguna pista sobre la autoría de los escritos. Tellols ha rescatado para la ocasión una idea que tenía desde hace tiempo y que desde el primer momento vio que podía adaptar forma de pieza de teatro. “Cuando se me ocurren cosas para escribir me planteo dónde encaja. Puede ser una serie, un cortometraje, una novela, una película… A esa idea teatral que conservaba no le llegaba nunca el momento de desarrollarla y cuando surge la posibilidad de participar en este proyecto pensé que se podía recuperar y tirar del hilo. Solo tenía cuatro notas redactadas, pero en un mes he podido escribir el texto”.
El texto que ha presentado a IVC el de Torreblanca lo tenía escrito desde hace un par de años en formato monólogo y más largo de lo que las bases requerían. “Pero en cuanto me propusieron participar pensé que ese texto era ideal para adaptarlo a dos actores. No hace falta que sean personajes, pero la dinámica del torneo marca que en la lectura que hacen los dos actores que están en un ring no haya acotaciones ni otro tipo de marcas. Es un juego muy interesante”.
Diferentes proyectos en marcha o en perspectiva
En estos momentos, además del escrito que se leerá en el ring, el vila-realense tiene dos proyectos en el Promercat de València, que es un mercado audiovisual que se hace en paralelo al Cinema Jove, y un proyecto de película que se titula Las cosas que hicimos, con la productora Wicker Films. Además, también está trabajando en una propuesta “que está en una fase más embrionaria” y que ha escrito a cuatro manos con una guionista de Vila-real, Amelia Barberá: Ocho hectáreas de bosque, un thriller rural ambientado en el Penyagolosa.
Sánchez Velasco, por su parte, tiene un par de textos que quiere montar y de los que prefiere no comentar nada para no gafarlos. Mientras llega el momento, se ha sumergido en la escritura de una novela. “Es un trabajo aun más duro y más complicado que el de dramaturgo, porque no tengo una trayectoria en el sector literario, pero estoy intentándolo. Primero con la redacción, y más adelante buscándole un hueco en las editoriales”, explica. Quizá tenga ocasión de publicar el libro y recibir algún premio como el Marqués de Bradomín que obtuvo con uno de sus primeros trabajos allá por 1998 o el reconocimiento que le llegó con Legado de C. en el 2014, un texto que montó con el director Jaume Pérez y que aún se recuerda diez años después.
Si Tellols echa la vista atrás se queda en el año 2015, cuando estrenó la webserie Beto. Se rodó pensando que solo lo verían sus amigos, “pero empezó a tener repercusión y a proyectarse por festivales y cambió la visión de la profesión que tenía y me permitió avanzar; fue el mejor máster que podría haber cursado”.
De momento, el primer asalto será en el Principal, con entrada gratuita, donde el público asistente decidirá quienes serán los escritores que pasen los cuartos de final en este particular torneo que supone un respaldo institucional a los dramaturgos de la Comunitat.
